ACUERDOS COMO ARCOS



Recientemente comenzó a ser removido el camellón central del periférico, para preparar el terreno y la entrada de maquinaria para la construcción del Viaducto Bicentenario en su parte confinada o de cuota. Es verdad que esto no afecta directamente en el fraccionamiento y colonia La Florida, Naucalpan, cuyos vecinos se encuentran en pie de lucha junto con las colonias aledañas en oposición a los atropellos que ha significado esta magna obra en sus derechos, pero no podemos dejar de reconocer que más de uno se pondrá nervioso con semejante evidencia.

Justo este tipo de noticias son las que ponen nerviosa a la población. De poco sirve que los vecinos dialoguen con el gobierno, gran interesado en que se termine la obra, si la empresa OHL se pasa los acuerdos por el arco del triunfo.
Los vecinos entienden que las obras básicas deben continuar, pero cuando está en proceso una negociación, lo que las actividades de la empresa constructora revelan es que de nada valdrán diálogos a diestra y sinietra. Revelan que la decisión va por encima de cualquier derecho civil. La suspensión indefinida de las obras y el empleo de maquinaria DEBE SER RESPETADO, no sólo por el gobierno sino por la empresa. De esto depende en gran parte que el capital político de Enrique Peña Nieto caiga o suba en el ánimo popular.
El gobierno de Enrique Peña Nieto no sabe de matemáticas, y mucho menos de matemáticas fractales y redes sociales. Eso nos queda claro. Estima que una población de poco más de 5 mil habitantes que conforman La Florida es de poca monta para sus aspiraciones presidenciales. Incluso debe estimar que los cerca de 200 mil habitantes de la zona no son suficientes para cumplir sus metas electorales. Si supiera un poco más de redes, tendría que reconocer que el capital político puede verse potenciado (no multiplicado) varias veces por una simple publicidad de boca en boca, y con más fuerza que si se contratara una millonaria campaña publicitaria.
Tomando en cuenta que por cada persona hay otras 6 que conforman su red de relaciones personales, la proyección de mensajes transmitidos de boca en boca entre redes es impresionantemente grande. El ejemplo más cercano de lo que puede lograr una sola página web "caduca" y sus secuelas lo tenemos en el caso del "voto nulo" y "voto blanco", que sin mediar campaña ni movimiento de por medio, por sí sola potenció la fuerza del argumento de carácter didáctico hasta catapultarlo a poco más del 5% de las preferencias electorales el pasado 5 de julio, en las elecciones mexicanas, generando un movimiento espontáneo y por propio convencimiento de los electores que, de haberse constituido como partido político, habría obtenido más que los pequeños ya existentes y además habría mantenido su registro.
Cuando de convencer a los "indecisos" se trata, para inclinar la balanza hacia una tendencia electoral estos números ahora cobran mucha mayor importancia. Lo saben los publicistas y los mercadólogos y los comunicólogos, pero algunos políticos siguen apostando a la fuerza de la voluntad de los intereses creados.
En torno al Viaducto Bicentenario, la polémica va más allá de unos pocos árboles talados sobre el camellón de La Florida, que por cierto es copropiedad que debería defender con semejante denuedo que los vecinos el mismo municipio de Naucalpan, a despecho de su flamante y nueva presidente municipal. Azucena Olivares Villagómez, coucheada nepotísticamente muy de cerca por un asesor "muy conocido de ella", pasa por alto que en gran parte el triunfo del PRI en Naucalpan se debió a que en La Florida arrasó en las elecciones del 5 de julio pasado, razón adicional por la que el electorado de la zona puede sentirse "traicionado" o por lo menos tratado con una patada en el trasero. Ese es el valor del voto diferenciado. Ojalá las reformas propuestas por el ejecutivo y su estudio por parte de los legisladores, en verdad impliquen atención a las demandas ciudadanas y no sirvan como buscapies electorales, pues la cerilla no está en la mano del cohetero.

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