Cómo te voy a olvidar o la prensa al servicio de los intereses


EN UN ARTÍCULO reciente escrito por Mario Maldonado para El Universal, sus remembranzas, su contenido veraz sin duda, tendencioso también, acerca de los encuentros entre empresarios pomadosos y el presidente Andrés Manuel López Obrador cuando candidato y después, me hizo recordar la vez que acompañé a mi padre y un grupo de ex presidentes como él de la Asociación Nacional de la Publicidad (decana de estas asociaciones del gremio) a un desayuno en el Club de Industriales. El tema a discutir: cerrarle el paso a cierto presidente en sus aspiraciones por reelegir su fórmula (no él), en el entendido de que sus acciones en su período al frente de la asociación había resultado en su detrimento, y una suma de pretextos para enriquecerse, desapareciendo la Escuela Técnica de la Publicidad para hacerse de ella y convertirla en su universidad o centro de estudios de comunicación particular donde formar a los futuros publicistas, mercadólogos y comunicadores. Me refiero a la institución educativa Centro de Estudios de Ciencias de la Comunicación que los colegas publicistas rebautizaron irónicamente Centro de Estudios de Chucho Cuevas.

En aquella reunión de la "plana pesada" y en la que, entre otros, estaban presentes dueños de medios como mi querido Francisco Ibarra López (Grupo ACIR), ex directores de publicidad y mercadotecnia de empresas como Coca-Cola Femsa (Jesús Machado), se decidió apoyar de manera uniforme a la candidata contraria, Lucía Gallart, sobrina de un ex presidente ya fallecido y muy buen amigo de mi papá, Luis Gallart, y hacer el cabildeo respectivo entre los asociados.

A mi padre y a otro ex presidente se les encomendó difundir la información delicada entre los conocidos periodistas relacionados al gremio como, por ejemplo, Guillermo Brunet que me viene a la mente.

Entonces los acompañé días después a un par de comidas con sendos periodistas especializados, columnistas en temas económicos y empresariales y ahí se les proporcionó la información seleccionada, pertinente, se les dio la "carnita", el "cebo" para que los lectores en general, patrocinadores anunciantes y asociados, supieran por medio de lo que hoy llamaríamos un influencer, es decir, un líder de opinión, enterado de primera mano, lo justo para "orientar" su opinión, pensar y sentir, en favor de una candidata y en contra del otro.

A ciencia y paciencia, las piezas del rompecabezas fueron cayendo en su sitio y la agenda fue perfilándose, fortaleciendo a una, en vez de al otro, hasta propiciar su triunfo.


De la teoría de dos pasos a la realidad intrincada

En ningún momento se pagó ni un centavo a esos periodistas ni a sus medios; no hubo chantajes ni abiertos ni cerrados, ni "sobornos" fuera de la inocente invitación a comer, conducta muy común en lo que a negociar se refiere; pero, esos periodistas conocían el peso de sus fuentes y la manera como podían influir en favorecer a sus medios en tanto empresas publicitarias. Inclinar la balanza con información objetiva y evidencia probable es también una manera de hacer política y tanto medios como quienes laboramos en ellos lo sabemos bien. Por supuesto, del otro lado el contrincante hizo lo propio.

No los podía acusar entonces ni puedo hacerlo ahora de ser "chayoteros". Porque en estricto sentido del término no lo fueron, como dudo que lo sea este joven analista Mario Maldonado, como no lo soy yo ¡y vaya que me han puesto el sambenito más de una vez!

Muchas veces quienes nos dedicamos a este oficio y profesión tenemos que arriesgar no solo el pellejo y el prestigio, sino pasar hambre literalmente (la mayoría, pocos logran amasar una regular fortuna) con tal de dar curso a cierta información que nos pueda granjear, por lo menos, ser tomados en cuenta como vaso comunicante e influyentes agentes de cambio, influencers. Por supuesto y ante todo, cumplir con nuestra finalidad y principales funciones sociales de informar y formar opinión pública. Y esto aplica lo mismo a un Joaquín López Dóriga, una Denise Maerker o un Carlos Pozos Soto "Lord Molécula". Puede ser un oficio ingrato que, para quienes tienen poder y los lectores, no deja de tener valor de un peón más en el ajedrez de la opinión pública y nos coloca a todos a veces en el gusto popular, a veces en el disgusto oficial, a veces a nivel del pasquín, a veces al nivel del Ciudadano Kane.

Pero, también es cierto que los tejes y manejes informativos pueden ser más intrincados de lo que el vulgo lector siquiera imagina.

Quienes hemos estado involucrados en estos asuntos de una u otra manera lo sabemos bien, y sabemos distinguir la información manipulada, de la empleada para manipular.


Un poco de historia paralela

Así, recuerdo algo similar cuando la vez que, allá por 2010-2012 estuve al frente de la Comisión de Comunicación de mis vecinos de La Florida y nos enteramos que los COPACI de turno pensaban dar un albazo, informando en conferencia de prensa su "autorización" al proyecto del Viaducto Bicentenario. Uno de los líderes entonces me miró preocupado, sorprendido y preguntó qué hacer. Organicé ipso facto, de manera improvisada y rápida, una conferencia de prensa aprovechando los esfuerzos de la contraparte que ya había reunido a los colegas periodistas, solo cambiamos el lugar una cuadra más adelante. El grupo se dividió y una parte atestiguó, como vecinos, los dichos de los otros sin intervenir ni generar conflicto, mientras la otra mitad preparó toda la información dura a la mano, la que se presentó luego, desbancando la atención de la prensa sobre la primera conferencia. El resultado, la opinión se inclinó en favor nuestro y al gobierno y a las empresas OHL y Rioboo no les quedó más que continuar las negociaciones, aunque no dieron su brazo a torcer en temas como la siniestra aguja de salida de incorporación de carriles centrales a laterales que hoy ya ha causado en solo un mes seis accidentes que se suman a los ocurridos, pese a nuestras advertencias, desde 2012, sea a causa del mal trazo u otras razones atribuibles a la estupidez adicional de los conductores.

Accidente Viaducto Bicentenario 2020
Cámaras de seguridad del C-5 del Estado de México captaron por sexta ocasión un accidente en la salida de carriles centrales a laterales de Periférico Norte, en La Florida.


Entonces, los periodistas, aun cuando el público luego execra y se queja de nuestra labor, vilipendiándonos con singular alegría, más tarde que pronto terminamos siendo llamados, no a cuentas (como llegó a pretender sobre mí el entonces gobernador Enrique Peña Nieto, razón por la que desde aquellos días el ojo avisor de los gobiernos municipales, estatales y federal están sobre lo que escribo, hago y digo), sino a contar lo que pueda satisfacer los intereses de tirios o troyanos; esto para los más diversos objetivos. Y esa es la clave de las relaciones públicas.


Relaciones públicas pandémicas. Un memorial a cambio de otro

Hoy, cuando se avecinan las elecciones intermedias en el país en 2021, más de uno, político, empresario, funcionario público, líder de opinión, estadístico o hijo de vecino busca sacar agua para su molino. A veces en el empeño de simplemente aprovechar la oportunidad, a veces en el interés de hacer un bien común.

Tiempos aciagos como los que vivimos a causa de la pandemia de Covid-19 y la recesión mundial no podían ser excepcionales. Y es lo que ocurre también con propuestas como la expuesta hace poco por la asociación Fomento Cultural Torres de Satélite, A.C., presidida por el Arq. Cuauhtémoc Rodríguez, mediante una idea bosquejada por él y el Lic. Eric Geraldo Fuentes Freixanet, vicepresidente de la saliente mesa directiva de la Asociación de Colonos La Florida, A.C., del fraccionamiento que habito y que alguna ocasión llegó a señalar a este plumífero de "falso periodista", "traidor", "poco profesional", "nada objetivo" y hasta estuvo dispuesto a llegar a los golpes frente a testigos en lugar público. En los detalles se cuela el Diablo.

Pues la propuesta consiste, a ojos de unos como el Comisario Lázaro Gaytán, en intercambiar un memorial por otro. Esto es sustituyendo el actual, maltrecho y olvidado Monumento al Policía ubicado en un rincón del que llamo el "Enclave del Mosquito" (por la figura que hacen las vialidades, al norte del Parque de los Remedios, al sur de la FES Acatlán). A ojos de otros, como el arquitecto Rodríguez, mejor que sustituir, crear un memorial y no un simple monumento, casi mojón, enfrente y con el pretexto "de moda" de dedicarlo a los "héroes de la pandemia de Covid-19".



Cómo te voy a olvidar

La idea del Arq. Rodríguez, conforme a su comunicado de prensa y entrevistado por Indicios Metropolitanos es hacer, por medio del arte "un instrumento de reflexión y reconciliación colectiva, una ofrenda de paz y resignación a la memoria de las víctimas del Covid-19". Y explicó el simbolismo del proyecto que tiene entre manos y ha propuesto tanto al gobierno municipal de Naucalpan, presidido por la alcaldesa Patricia Durán Reveles, como a otras instancias particulares y oficiales, siguiendo un poco y a la mexicana lo hecho con anterioridad en España, por ejemplo.



Está inspirado en el desarrollo magistral de la sección áurea y la geometría sagrada, dónde el círculo, con un diámetro de 30 metros, es el eje rector de toda la composición. De manera proporcional, emergen hacia el cielo 7 prismas triangulares de 15 y hasta 45 metros de altura, los cuales, por su diseño pareciera que desafían a la gravedad, ya que su estructura está diseñada en comunión con el viento. En conjunto, conforman una antorcha que representa la luz que ilumina, calienta, purifica y protege.

Cabalísticamente, el número 7 está presente como referencia a la perfección con la que fue creada la vida. El color blanco hace referencia a las almas de los seres humanos que se perdieron en esta pandemia. Al centro del memorial se localizan dos estelas que parecieran estar unidas (pero, no lo están) y conforman en su remate una estrella de 7 puntas , la cual rige los valores universales. Las dos rampas integran a su vez dos cascadas, dando como resultado final el mensaje de los 4 elementos de la naturaleza, dónde la Tierra es el círculo, el Aire es el movimiento simulado de los prismas, el Fuego es el conjunto de todo el Memorial y por último el Agua que se manifiesta en las cascadas.

El "Enclave del Mosquito". La flecha indica el lugar que ocupa el Monumento al Policía,
el recuadro marca el área de cerca de hectárea y media que ocuparía el memorial.
Foto: Archivo Indicios Metropolitanos.

La propuesta indica como ubicación probable del memorial un terreno cercano a la parada de transporte público de la FES Acatlán, al sur de la Mega Comercial de San Mateo, y próximo al CCH. Es un terreno conocido porque en su espacio, antiguamente se ponían —qué casualidad— los circos y hoy es terreno de composta, está cercado y controlado con una puerta, lo que evitaría el vandalismo. A pregunta expresa de Indicios Metropolitanos, el Arq. expuso:

El costo aproximado es de 5 millones de pesos y buscaremos el apoyo de las empresas que estén interesadas en apoyar. Por la importancia del proyecto, no solo estará involucrado el gobierno municipal, buscamos que se integren los gobiernos estatal y federal. Es un proyecto que, por su carácter, es de trascendencia internacional. Como dicen los "Ángeles Azules": de Naucalpan para el mundillo...


En mi humilde opinión, el concepto general de la propuesta es agradable. Solo le añadiría esto: las imágenes relacionadas con el coronavirus, que hasta en círculos del maíz ha aparecido, cambiaría la idea y el significado de la estrella.


Otra cosa, la vista lateral es "peligrosa", en el sentido de que los legos tomarán como referencia "el helado" para darse cita en las inmediaciones del memorial, de hacerse. Aunque, la sinuosidad es grata. Quizás, podrían añadir al concepto los artistas Rodríguez y Fuentes Freixanet, la posibilidad de ampliar el significado complementándolo desde los cuatro lados, desde dentro y desde lo alto, dada la significación internacional (también por eso mencioné los crop circles). El otro tema es dónde ubicarlo, que luzca, signifique y no lo fastidien las inmobiliarias ni los vándalos. Indicios Metropolitanos cuestiónó al Arq. Rodríguez:

IM: ¿Será ese sitio propuesto el más adecuado? ¿Habría algún elemento adicional alrededor? ¿Impacto ecológico? Pregunto porque cerca está el Cerro de Moctezuma, zona arqueológica saqueada durante años. El Parque y Convento de los Remedios, cuevas que son hábitat de murciélagos y una amplia fauna cuya biodiversidad ya han sido afectadas por la mancha urbana, la inseguridad rampante y, además, cerca están las oficinas de la Dirección de Ecología y Medio Ambiente de Naucalpan.

CR: Solo andadores y algunos lugares de descanso y reflexión. Nada más. La iluminación estaría a cargo de nuestro amigo el Arq. Gustavo Avilés quién iluminó el Memorial a las Víctimas de la Violencia de Estado, ubicado en Chapultepec.

IM: ¿La que Jacobo Zabludovsky denominaba irónicamente la "paleta Mimí"?

CR: No, esa es la Estela de Luz.

IM: Cierto, pero también fue muy polémico ese memorial. Ya imagino a la gente tomando este memorial como referencia de tránsito: "nos vemos por el helado". Y, si llevare detalles oscuros, "te bajas en la parada del hot fudge".

CR: Al final estamos expuestos a la crítica y no por eso nos vamos a detener. Sobre todo por el carácter del memorial , este estará expuesto a críticas y al vandalismo como tú bien lo mencionaste.


Artistas somos y en el camino andamos

El arte, sin duda, tiene un papel fundamental en la sociedad y la historia, por muchos motivos. Nunca es pertinente, pero siempre es oportuno. Rara vez es conveniente. ¿Es conveniente proponer la construcción de un memorial en medio de la pandemia, de la recesión nacional y mundial, cuando el municipio de Naucalpan hace malabares con el presupuesto a falta de ingresos, la austeridad republicana morenista y apenas medio hace esfuerzos para "capacitar" a distancia a la población en temas como la planeación de negocios y la mercadotecnia, incubando proyectos de dudosa o nula garantía de retorno de la inversión en la forma de creación de empleos?

La idea de reflexionar sobre los "caídos" (infectados o muertos) por el Covid-19 se antoja noble, sensible, emotiva; pero, ¿es el momento de destinar 5 millones que hacen falta para paliar la hambruna que ya se instaló como consecuencia? ¿Sería mejor esperar a las cifras finales, a saber cuándo las habrá cuando aun la vacuna y la recesión van para largo?


Entre el sueño y la memoria

Recuerdo que al Arq. Antonio Dovalí, principal proyectista del Viaducto Bicentenario le cayó en pandorga que yo le dijera en una junta a puerta cerrada entre vecinos, empresas constructoras y gobierno que su "obra de relumbrón" adolecía de muchas fallas y falsas justificaciones, a pesar de la nobleza en la idea de origen como una via para el mejoramiento de la movilidad regional. "No es una obra de relumbrón", me dijo airado. Al cabo de los años se ve qué ha sido en realidad.

Hoy, la economía está parada. ¿Qué ganarían los empresarios dispuestos a invertir en el proyecto, cuando ni siquiera los gobiernos municipal, estatal y federal han dado luz de apoyos para ellos, ni siquiera fiscales? ¿La cantidad de trabajos generados, derivados y directos por ese proyecto, justificarían la obra de un memorial cuando hay carencia de medicamentos y equipamiento médico? ¿Con quién se buscaría quedar bien, con deudos o con personal médico? El coronavirus 19 no discrimina. Que es de cuidado y no se le debe menospreciar, cierto; pero, proporcionalmente no ha sido tan letal como otras pandemias a pesar de las cifras alarmantes, dicho por los especialistas, incluido el propio Dr. Epidemiólogo Hugo López-Gatell Ramírez subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud del gobierno federal.

Estadísticas de la pandemia de COVID-19 actualizadas al 21 de agosto de 2020.
Fuente: Universidad Johns Hopkins.
Foto: Archivo Indicios Metropolitanos.

Así, cerrando el círculo mágico de las conexiones memorísticas pensemos: si consideramos el sueño (en su primera fase) como un depurador de recuerdos (sólo quedan en nuestra mente lo importante o lo más impresionante que nos haya sucedido), al no dormir no eliminamos recuerdos; es decir, no tenemos la capacidad de olvidar muchas cosas con las que no podríamos vivir si las recordamos a diario.

La pandemia actual y la recesión franca que nos envuelven nos han quitado el sueño y, como a Funes el Memorioso, la experiencia vivida nos lleva a comprender que nuestra memoria es un vaciadero de basuras, que el símbolo genérico "perro" abarca a tantos individuos dispares de diversos tamaños y diversa forma que, si a Funes le molestaba que el perro de las tres y catorce (visto de perfil) tuviera el mismo nombre que el perro de las tres y cuarto (visto de frente), cabe preguntarnos si vale la pena rememorar lo hecho como lo deshecho, en el afán de reconstruir lo perdido, como si en la pérdida y en la ausencia se diera el mismo significado que en la ganancia y la presencia. No es lo mismo estar que ser, pero se necesitan ambos para existir.

A estos empresarios de ahora, quizá decepcionados por el gobierno actual, como a aquellos publicistas, o desesperados por encontrar un asidero mediante el cual paliar la crisis, el chirrión les salió por el palito o, en otras palabras, el tiro les salió por la culata. La candidata triunfadora logró que su fórmula continuara por cerca de 4 períodos, con distintas caras al frente, pero la misma tendencia, llevando a la ANP al mayor de sus declives, descrédito y, si aun flota, es porque Dios es grande. ¿Podemos decir lo mismo de México? ¿De Naucalpan?

Por oficio, leo, veo y escucho lo mismo a Sin Censura con Vicente Serrano que a Carlos Loret de Mola y me siento como ese testigo en las mesas del poder, barajando lo que dicen unos y otros, navegando entre los indicios que me hagan capaz de comprender si en verdad hay un lado de bien y otro de mal, o quizás solo son el helado y el barquillo, los cabos de una cuerda que, cuando se tocan, cierran el círculo de lo que somos para bien y para mal.


Normalidad inexistente


UN INDICIO ES, este, de hace dos meses y que hoy, al irse recrudeciendo la pandemia con sus efectos aunados a la recesión mundial y lo que se avecina, empieza a hacerse viral en redes sociales.

Lentamente, la cada día más amplia difusión de este tema musical intitulado "Que vuelva" del compositor andaluz Juan Valderrama (no el único, por cierto) se presenta al público en general desde mayo como un punto de vista a la vez desesperado y esperanzador salido del ánimo del encierro y el estanco. Afirma su optimista autor:

«Cada día está más cerca el final. La meta ya se ve y aunque cansados y doloridos la cruzaremos juntos. Volveremos a ser los de siempre; con cicatrices profundas y el recuerdo siempre presente a los que ya no están, pero nada ni nadie nos va a quitar nuestra esencia de pueblo que se abraza, se besa y celebra la vida como ningún otro sabe hacerlo».

Esta canción está dedicada a nosotros mismos, y a todo eso que tanto echamos de menos, porque a pesar de todos nuestros defectos y nuestras diferencias, somos un gran país. Por eso saldremos adelante y seguiremos siendo ese lugar donde la gente es tan feliz que a veces olvida la suerte que tiene. Quizá aprendamos a valorarlo y a valorarnos un poco más.

No cabe duda que el arte también se ha visto afectado de manera importante por la ansiedad y la angustia. No obstante, a contrapelo de los augures, las estadísticas y los datos duros de la realidad, el afán por crear y recrear no cesa en muchos de nosotros.

Algunos de los que nos dedicamos a escribir (en mi caso poesía, de manera especial, y no nada más) o nos sentimos pasmados, abrumados y con dificultad barruntamos letras, palabras sueltas en la página en blanco, sintiendo una orfandad sustancial; o, al contrario, nos desbordamos en hilos de palabras que tratan de poner un relativo orden al sentir y al pensar, sea en forma de prosa, de narrativa de ficción o crónica del diario acontecer. O nos extraviamos en el infame ocio proyectivo fundamento de Tik Tok con mensajes repetitivos, absurdos que más parecen el clamor de gente que quiere que se sepa que aún existe "normalmente".

Por lo que a mí toca, trato de llenar mis vacíos como nunca antes y algo pasa que nunca lo consigo preocupado como estoy con el diario sobrevivir. Mi frecuencia en la publicación de estos indicios tanto como de contenidos para mis otros blogs está supeditado a tener claridad de mente y hoy, acaso la consigo si logro conciliar el sueño o cuando armonizo mis ansias de la vida real con mis sueños de mi vida virtual en Second Life.

La literal hambre se empata entonces también con la metafórica inopia y la ausencia de abrazos y de ese contacto físico, esas presencias que, como dice la canción, dan a nuestra existencia sentido, significado.

¡Y ya quisiera uno que cantando se fueran las penas! Y a veces se van y vuelan; pero, vuelven como ahora no, en cambio, los motivos que nos sostenían.

La normalidad nunca ha existido. Siempre ha sido una ilusión supuesta por los que gozan de imaginar situaciones donde todo lo tienen bajo control. Normalidad, puntualidad... ¡Puros pretextos para joder al prójimo so pretexto de la "responsabilidad"! En los detalles de la relatividad están el demonio y su regalo prometéico: la libre volición, lo que nos hace humanos, si hemos de traer a cuenta a Nietzche y sus sutiles enseñanzas en Ecce Hommo.  Porque si hacemos oídos a los necios, time is money y todo lo que queda en los extremos de la curva normal es visto más como monstruosa anomalía en vez de como la excepción que confirma la regla, no viceversa. Así que hablar de una "nueva normalidad", el súper hombre renovado, recargado, contrito en el límite de lo que le es posible como normal posterior a la pandemia es bordar en un tejido inexistente, es tramar entre la urdimbre del aire, construir castillos de arena con las nubes.

La normalidad en todo caso se ciñe al ahora; pero, un ahora anclado en la memoria de lo que se ha sido y fue y no se repetirá de la misma manera, como el río de Heráclito o la Barca de Teseo. En mi caso y este instante y para ti también que posas tus ojos en estas líneas, la normalidad es este tren de letras sin más rumbo fijo que la idea de hacerse inteligibles no en tu cabeza tanto como en tu corazón y el mío.

Y no me importa si eres hombre o mujer o miembro de un género inventado para justificar tu normalidad inexistente y para incrustarte en una normalidad que aquellos y esotros nos venden como novedosa, liberadora identidad que apunta a más que ser impronunciable multiplicación de tendencias, inclinaciones o modas o modos de ser. Así, sin pausas ni respiros para eludir la trampa discriminadora y limpiar la puntuación segregacionista.

Digo esto por que me nace del alma anhelar que vuelva, que vuelva a mis dedos la poesía que por momentos me abandona entre las garras de mis siete gatos a los pies de mi cama reunidos, y desde donde me miran ronroneando, con ojos de soledad multiplicada que en el crepúsculo se asoma dispuesta a hacer equilibrio entre las sombras.

Anoche miré una estrella, en este cielo que ya apenas la civilización permite con sus luces vislumbrar. Y la miré fijo. Y pensé en las conjunciones acumuladas por siglos. Y en las conjunciones de ideas entrelazadas entre las noticias y los silencios, entre ejercicios bélicos de esos contra China, y de aquellos contra Hezbolá, y de Moderna y Astra Zéneca, enfilando baterías contra un coronavirus cuya normalidad inexistente sin embargo existe, a pesar de Galileo. Y pienso entre conjunciones y me digo y me recrimino y me muerdo lengua y labios y huevos, para no decir a Trump o AMLO que son... yes griegas que se multiplican berrinchudas en caprichos de malcriados por el sistema. Y veo así al capitalismo morir entre estertores ocasionados por la inquina de la codicia. Y veo que somos en el mundo tantos que, en medio del insomnio, rezo para que Dios se acomida de nosotros y nos mate de una buena vez por ventura de lo que hemos dejado de planeta. Y que venga de nuevo una Gran Guerra que nos merme y reduzca ¡más que a simple polvo!; pero, que nos deje quizás en calidad de brizna; para de veras aprender a perdonar sin volvernos pretexto del olvido. Y anhelo entonces como Dorothy volar mediante la vorágine al encuentro de la extraterrestre bruja que justifique mi hallazgo del país de Oz y reencontrarme con mi amado Toto.

Hace unos días una familiar me conminó a escribir esa novela a partir de las historias de la familia, ese "best seller" potencial y que vengo barruntando desde hace 20 años. Entonces la conjunción da paso a la disyuntiva y dudo: o muero en el intento satisfecho solo en el honor y el ego o muero por causa de la desidia o muero herido por la frustración de, otra vez, escribir en el cielo al que ya casi nadie mira si no es que acaso se hace uno evento extraordinario, ovni o fenómeno atmosférico asociado a alguna clase de torcida conspiración del destino.

Pero, al adverbio entonces le sigue la preposición normalizadora. ¿Para qué escribir todas estas líneas? ¿Para expresar un desahogo que a nadie importa y deja nada a ninguno que hubiera podido llegar hasta este signo? Cabe el silencio desde las entrelíneas y contra la ortográfica presunción de lo normal y perfecto. Tras el estallido sobreviene la sordera. Sobre la muerte, el regocijo de unos y la tristeza de otros y la indignación de los de allá y la irá de los que tienen enfrente. Desde el verbo, ese que fue en el principio para de inmediato dejar de ser, la nada se instala so pena de volverse algo, si no lo restante de un todo que es simiente de mañanas, gramática y ya.



Información tóxica



DESDE EL COMIENZO DE LA PANDEMIA empezó a difundirse de manera más acusada y hasta la saciedad información contradictoria acerca de la probable utilidad del dióxido de cloro, entre muchos otros compuestos y fármacos, como un remedio para contrarrestar los efectos del Covid-19. Con el paso de las semanas, a despecho de las informaciones y estudios especializados, médicos, disponibles en multitud de plataformas y medios, videos y artículos variopintos fueron publicados y compartidos tanto en pro como en contra, algunos tachados de bulos y que, no obstante su falsedad la Organización Mundial de la Salud ha investigado para advertir, confirmar o desmentir las consejas populares circulantes en redes sociales. Hasta el mismo Donald Trump, presidente de EE.UU., cuestionó y ponderó ¿sarcástica o irresponsablemente? su uso —en realidad de la hidroxicloroquina, un compuesto diferente, empleado para el tratamiento de la malaria—, poniendo en una situación incómoda a su secretaria de salud a pesar de las publicaciones de advertencia muy previas de la FDA.




Desde la semana pasada un par de notas provenientes de Ecuador han vuelto a poner el tema sobre la mesa y no deja de ser preocupante que también clérigos incurran en el error de confundir y promover patrañas no suficientemente confirmadas por la ciencia, dividida entre "adoradores del ClO2 (dióxido de cloro)" y los "detractores" (entre los que me cuento) del mismo "desinfectante" en tanto "remedio milagroso" para la salud. Por todos lados del mundo parecería estarse dando una confrontación entre la verdad y la mentira que llega incluso a una "cacería de brujas" en la persecución legal de especuladores, estafadores y promotores fraudulentos, oportunistas al amparo de la angustia y la zozobra ocasionada por estos días aciagos de pandemia, recesión mundial y lo que se sume.



No se trata ya de si la gente lee más, sino si lee mejor, si ha aprendido a elegir las fuentes de información, a discriminarlas, a verificar los datos.

La gente común no lo hace. Y quienes tendrían que hacerlo, periodistas profesionales, científicos, funcionarios públicos comprometidos con la labor de informar, educadores, no lo hacen tampoco a cabalidad (hacemos, diría el otro). Y no lo hacen porque o no saben cómo, lo ignoran, no tienen la pericia, la metodología o los recursos —incluido el conocimiento más elemental respecto del tema— de cualquier índole para investigar a fondo. Pretextan entre otras razones la dificultad técnica, el vocabuario, la extensión aceptable de los textos a producir para el consumo masivo. La mayoría prefiere quedarse con lo prejuzgado a priori, lo supuesto, lo imaginado, lo narrado a manera de "testimonio inexcusable", ligero, digerible y síntesis a favor o en contra, porque es perezosa y prefiere confiar a ciegas en quien estima como el mejor enterado, así no lo conozca más que por limitadas referencias de contubernio o conexión; o porque es crédula.

Pedanterías aparte y para no confundirnos

El conocimiento necesario para comprender algo, aunque suene pedante, no necesariamente (valga la redundancia) tiene que serlo cuando de estar bien informado se trata, para bien y para mal. Y disculpa las palabrotas "técnicas", amigo lector, pero son las que explican de manera puntual a qué me estaré refiriendo enseguida.

No es lo mismo el dióxido de cloro que la hidroxicloroquina: un principio activo antimalárico o antipalúdico utilizado para reducir la inflamación en el tratamiento de la artritis reumatoide y del lupus; como tampoco es igual que la cloroquina, un fármaco del grupo de las 4-Aminoquinolinas que se utiliza en el tratamiento o prevención de la malaria,​ así como en el de determinadas enfermedades autoinmunitarias ​como la artritis reumatoide ​o el lupus eritematoso sistémico. Lo que las distingue es la presencia de un grupo hidroxilo en el extremo de la cadena lateral. El hidroxilo es un grupo funcional formado por un átomo de oxígeno y otro de hidrógeno, característico de los alcoholes, fenoles y ácidos carboxílicos entre otros compuestos orgánicos.

La hidroxicloroquina está disponible para administración oral como sulfato de hidroxicloroquina (Plaquenil, uno de sus nombres comerciales), de los cuales 200 mg contienen 155 mg de base en forma quiral. La quiralidad es la propiedad de un objeto de no ser superponible con su imagen especular. Como ejemplo sencillo, la mano izquierda humana no es superponible con su imagen especular (la mano derecha). Como contraejemplo, un cubo o una esfera sí son superponibles con sus respectivas imágenes especulares. El dióxido de cloro no tiene una geometría quiral.



Algunas lecciones de química orgánica y aplicaciones médicas

La hidroxicloroquina tiene una farmacocinética similar a la cloroquina, con rápida absorción gastrointestinal, y se elimina por vía renal, lo que establece ya riesgos, entre otros, de insuficiencia renal de no administrarse de manera correcta.

La historia de la hidroxicloroquina se remonta a Perú, donde los indígenas extraían la corteza de los árboles Cinchona (o chinchona) y usaban el extracto (Cinchona officinalis) para combatir los escalofríos y la fiebre en el siglo XVII. En 1633 se introdujo esta medicina herbal en Europa, donde se le dio el mismo uso y también se empezó a utilizar contra la malaria. Pero, fue el médico y homeópata alemán Samuel Hahnemann, quien realizó su conocido experimento con Quina, tomando de esta cuatro dracmas (gotas, sobre este concepto escribiré un texto aparte) dos veces al día, lo que le produjo paroxismos semejantes de frío y fiebre. Concluyó que no podía seguirse diciendo que la Quina cura los paroxismos de frío y fiebre, porque es una droga astringente o amarga. La verdadera deducción resalta enérgicamente: la Quina cura los paroxismos de escalofrío y fiebre porque los produce.​ Es decir que, en una persona sana, la Quina produce los mismos síntomas que curaba en el enfermo, lo que no significa por extensión que sane al enfermo. El principio homeopático conocido es el lema que sustenta a esa disciplina en latin: "similia similibus curantur", lo semejante se cura con lo semejante, máxima que también se presta a equívocos interpretativos, leyendas y mitos, como los expuestos ¿irónicamente? por el presidente Trump al exponer la idea de que si el covid-19 puede eliminarse con facilidad aplicando desinfectantes en manos y superficies, pues lo "lógico" sería inyectarlo o beberlo para "limpiar y desinfectar" al organismo desde dentro.

Derivados de esas investigaciones surgieron remedios como las bebidas tonificantes o tónicos que "daban tono", enrojecían al paciente dándole una apariencia más "saludable" y proveyendo de una energía vital pasajera. El agua carbonatada dio paso al agua quinada y estas a bebidas refrescantes endulzadas de cola (en referencia a la semilla medicinal, tanto como a la pasta medicinal) como la Coca-Cola de la que se desconoce a ciencia cierta la fórmula, pero en la que se sospecha la presencia de algun alcaloide derivado de la cocaína o de la quina.

La cloroquina, por su parte, es citotóxica, pudiendo provocar daños en el sistema nervioso, el corazón, el riñón o el hígado. No es difícil que, de nuevo, aplicando la máxima homeopática y mirando los efectos del covid-19 sobre el organismo desatando "tormentas de citocinas", haya quien piense que los efectos de la cloroquina incidirían como símil contrarrestante, pues calmar dichas tormentas podría ser la clave para el tratamiento del también llamado SARS-CoV-2.

La citotoxicidad es la cualidad de algunas células para ser tóxicas frente a otras que están alteradas. La citotoxicidad constituye uno de los mecanismos efectores de ciertas poblaciones celulares especializadas del sistema inmunitario consistente en la capacidad para interaccionar con otras células y destruirlas.
Las tormentas de citoquinas se han asociado con varias enfermedades, no todas infecciosas, como el Ébola, la gripe, la malaria, el lupus y ciertos tipos de artritis. Se manifiestan de manera diferente en cada caso, y las particularidades de los casos severos de COVID-19 aún no se han resuelto, lo que probablemente varía de un paciente a otro. Los investigadores aún no están seguros de las características que ponen a ciertas personas en mayor riesgo ante estas respuestas exageradas, aunque la genética y la edad parecen desempeñar un papel contribuyente [WU, 2020].

Tras la administración de cloroquina en dosis adecuadas para el tratamiento de un ataque agudo de paludismo o amebiasis extraintestinal se han observado efectos ligeros y pasajeros como: dolor de cabeza, prurito, molestias gastrointestinales, anorexia, náuseas, vómitos, diarrea, cólicos, estimulación psíquica y raramente episodios psicóticos y convulsiones. Rara vez se han observado efectos cardiovasculares, como hipotensión o cambios electrocardiográficos (particularmente inversión o depresión de la onda T, ampliación del complejo QRS). Se han registrado algunos casos de sordera de tipo nervioso después de tratamientos prolongados, generalmente en dosis elevadas, y también neuromiopatías, discrasias sanguíneas, erupciones de tipo liquen plano y cambios de pigmentación en la piel y mucosas.

Sustancias que son tóxicas para las células, como lo es el elemento cloro, pueden estar involucradas en la inmunidad o pueden estar contenidas en los venenos. Estos se distinguen de los agentes citostáticos en el grado de efecto. Algunos de ellos se usan como antibióticos citotóxicos, mas no por ello ha de pensarse como consecuencia que el dioxido de cloro puede ser empleado de semejante manera aun cuando se justifique que la clave diferenciadora entre la cura y el veneno está en la dosis y la frecuencia de administración e ingestión.

Por otra parte, se han observado trastornos visuales y complicaciones oculares al usar cloroquina en tratamientos prolongados.

Lo que no mata, fortalece

La conseja popular afirma que, lo que no mata, fortalece, y los promotores del Dióxido de Cloro parecen tomarla como máxima sin detenerse en las causas y las consecuencias, y lo que va en contra es tomado como una oposición del sistema reinante, mientras ese sistema los tacha de variante conspiranoica.

La gente consume lo primero que encuentra, se conforma con lo superficial, lo atractivo, grato y lo que da soluciones rápidas, mágicas, milagrosas, sin cuestionar lo que hace posible que eso suceda, si sucede en realidad. Eso es a lo que normalmente han apostado publicistas, mercadólogos y periodistas (incluyo a influyentes blogueros y vlogueros) sin escrúpulos, más preocupados por el incremento de ventas que en beneficiar a los consumidores. Y no importa si se trata de un profesional de la medicina y la química, pensar por fuera de la caja puede ser tan atractivo, tan productivo, como destructivo. La creatividad también ha creado monstruos.



Te preguntaría, amable lector, ¿cuántos hipervínculos aclaratorios, explicativos, descriptivos incluidos en este texto has seguido para abundar en el conocimieneto de esas palabras, conceptos, fuentes, arduas de comprender y pronunciar que he soltado en la redacción de este texto? ¿De qué sirve mi trabajo de síntesis si no haces el esfuerzo de consultar más allá de mis entrelíneas? ¿Acaso de veras esperas todo tan digerido y en la boca? ¿Por qué no dudas de lo que escribo y publico? ¿Crees a rajatabla lo que aquí redacto o crees que por estar opuesto aparentemente a lo que es tu opinión estoy equivocado? Y pregunto esto suponiendo que has tolerado las líneas y los videos previos hasta llegar aquí.

Al hacer una búsqueda mediante su explorador en internet, la gente no navega más allá de unas 10 a 20 páginas, y es mucho decir pues en realidad no pasan de las primeras 10 referencias enlistadas en la primera página de resultados de la búsqueda. No lo digo yo, lo dicen los estudios respectivos acerca de la metodología y la confiabilidad en la búsqueda de información. De ahí la importancia y la trampa de las palabras clave como detonador de las búsquedas algorítmicas de Google y las demás plataformas. Ni los hashtags tan llevados y traídos como tendencias informativas sirven cabalmente para orientar el sentido de la información hacia lo correcto, preciso o verdadero.
Frente a la lista de resultados, el lector actual tiene que evaluar de forma rápida para tomar decisiones en dos sentidos: por una parte, hay que evaluar la pertinencia de la información con respecto a lo que se busca; y por otra, hay que decidir si la información es potencialmente confiable. El exceso de información requiere que el lector tome decisiones rápidas con el menor riesgo posible de perder algo importante o de revisar sitios que no son confiables. Pertinencia y confiabilidad son dos componentes que se interrelacionan en el momento de decidir qué sitios abrir. En primer lugar, es fundamental tener criterios para saber si la información que contiene un sitio es pertinente en relación con el propósito de búsqueda. Pero, la pertinencia no es tan fácil de determinar; se vincula, también, con la posibilidad de interpretar un nuevo tipo de texto que es la lista de resultados que arroja el buscador: una lista con títulos y breves fragmentos que contienen las palabras de búsqueda que utilizó el usuario y donde, con frecuencia, aparecen puntos suspensivos con una función diferente a la que tienen, en tanto signos de puntuación, en otros tipos de texto.

La evaluación de la confiabilidad es necesaria para poder seleccionar, dentro de lo pertinente, aquello que puede ser útil, pero, sobre todo, seguro. Determinar la confiabilidad de la información es un problema del que tradicionalmente se ocupaban los editores de los textos de estudio; sin embargo, en Internet esta responsabilidad recae en los lectores, y constituye uno de los quehaceres del lector actual [KRISTKAUSKY / FERREIRO, 2018].
 
Las falsas noticias, la información deficiente circula no por causa de malos o perversos informadores, o por una distorsión matemática del algoritmo solamente, sino porque tú, yo, proveemos los datos a partir de los cuales se calculan las probabilidades de hallazgo de aquello que forma mediana satisface nuestra necesidad de información y conocimiento. El algoritmo discrimina en función de las probabilidades de combinación y permutación de los datos, de los documentos con base en la experiencia individual o de grupo. Si no, trata de buscar lo mismo en dos o tres ordenadores diferentes y verás resultados distintos, organizados de manera desigual.

Por eso es importante que, en esta Era de la Información y el Conocimiento cada lector aprenda como una primordial habilidad y competencia comunicativa la de saber buscar de manera eficiente la información de su interés. Y aquí, en la palabra interés, está el quid del asunto, pues a final de cuentas ¿qué autoridad tiene la estatura suficiente para clasificar la información y las fuentes correctas, precisas, verdaderas para todos, cuando la verdad absoluta no existe y todo es según el color del cristal con que se mira?

De ahí que también es válido, al contrastar presumibles bulos de ida y vuelta, preguntarnos si lo que unos consideran válido de verdad lo es y todos los demás están equivocados; o viceversa, si uno está equivocado mientras los demás no.
Un gran porcentaje de estudiantes y profesorado del área biomédica, utilizan Google como la primera opción de fuente de información (FI) ante una pregunta académica, por otro lado sólo el 40% de las búsquedas realizadas por médicos para resolver problemas clínicos, encuentran la información correcta [MONCADA, 2014].
Platónicamente hablando, ¿quién está dentro de la caverna mirando las sombras proyectadas? Quien ha salido de la caverna y hace evidente la razón de las proyecciones, ¿topó con verdad o con una maquinación para distorsionar y canalizar la verdad tras la verdadera mentira y la mentira presentada como verdad indubitable?

El Dióxido de Cloro al descubierto

El conocido como Suplemento Mineral Milagroso (porque se le atribuyen beneficios hasta para el tratamiento del autismo) , por sus siglas en inglés MMS o CDS promovido entre otros por el biofísico suizo Andreas Kalcker, no es otra cosa que Dióxido de Cloro o Clorito de Sodio (NaClO2) con agua destilada que se activa con un ácido, por ejemplo el cítrico, el muriático (ácido clorhídrico), para producir Dióxido de Cloro en forma de gas. El Clorito de Sodio es un limpiador empleado en las industrias papelera y textil como blanqueador y, en pequeñas dosis, desde 1944, para hacer potable el agua. Una ventaja de esta aplicación, en comparación con el cloro (que ha sido el sistema más barato y comúnmente utilizado hasta ahora), es que genera menos trihalometanos (gases tales como el cloroformo) al reaccionar con los contaminantes orgánicos que pueda llevar el agua a potabilizar.

En su libro La Salud Prohibida, Kalcker expone sus respectivas conclusiones como biofísico, reconociendo que no es médico y en los capítulos 7 y 8 del mismo hace un listado y observaciones acerca de la toxicidad del producto, y afirma:
Hay que considerar que estos efectos indeseables están estudiados y dirigidos a los trabajadores que emplean o fabrican productos a base de dióxido de cloro.
Por tanto las dosis a que pueden estar expuestos para que ocurran estos efectos son mucho más altas que las recomendadas y usadas en otros campos, como en el campo terapéutico desarrollado en este libro, y por ello no se puede extrapolar.
Los efectos de una sobre-exposición crónica pueden producir daño en los pulmones y agravar los problemas de asma y otras patologías respiratorias preexistentes [...]
Es bueno ser escéptico en nuestra sociedad tan manipulable por la información engañosa, pero no es lo mismo ser escéptico que ser detractor. Es fácil desacreditar una idea simplemente por ser incrédulo. Pero el hecho de que no pueda creerse una cosa no significa que no sea así, y por lo tanto los detractores de una idea tienen la obligación de probar lo contrario.
Para probarlo necesitan evidencias y esas evidencias deben ser fehacientes, y no solamente una copia de otra opinión sin fundamento y sin investigación propia [...]
Habitualmente, se utiliza la fórmula de que los datos obtenidos en las investigaciones son falsos y por lo tanto el científico está supuestamente cometiendo un fraude[...]
Los detractores se limitan a copiar y a pegar textos oficialistas que acusan a la sustancia de una supuesta toxicidad, sin haberla estudiado de manera profunda, no dándose cuenta de que no es lo mismo inhalar que ingerir [KALCKER, 2016, pp. 407-409].
Pero, además, también advierte:
¿Es cierto que el dióxido de cloro puede curar todo?
Quiero dejar claro aquí que el dióxido de cloro no puede curar todas las enfermedades, sobre todo una de las peores enfermedades de la humanidad:... La estupidez ...
Sólo el cuerpo puede curar enfermedades, y existen herramientas que le ayudan a realizar esta labor, cuando no es capaz de hacerlo exclusivamente por sí mismo.
Jim [Humble] afirmó en su libro, que con el MMS se pueden curar todos los cánceres... evidentemente no es así, ya que se trata de una enfermedad compleja, con muchas causas, y además existen muchos tipos. Sé que él lo dijo de todo corazón, cuando al principio se podía ver que la gente se recuperaba, y lo que sí es cierto, es que muchas personas se han recuperado completamente de cánceres terminales; pero, no es lo mismo decir muchas que todas.
Otra cosa importante, es que en ocasiones se confunden los términos químicos, les ocurre incluso a profesionales médicos. La sustancia base precursor para hacer dióxido de cloro es el clorito sódico [op.cit., p. 59].
Sus defensores, entre los que se encuentra la monja (con licencia) Teresa Forcades quien se ha erigido también como crítica del sistema capitalista; sus defensores, decía —que han llegado a crear en EE.UU. por iniciativa de Jim Humbel y la iglesia católica la "iglesia" Génesis II de Sanación y Curación como una artimaña legal para aplicar el compuesto en calidad de "sacramento" acogiéndose así al derecho eclesiástico y, además, "potegerse" de la persecución estatal—, tienen razón al afirmar que los detractores se equivocan al presentarlo como cloro, a secas; pero, hay que decir que estos pasan por alto que el elemento cloro, gaseoso en su estado natural, como se asienta en la Wikipedia, "en condiciones normales y en estado puro forma dicloro: un gas tóxico amarillo-verdoso formado por moléculas diatómicas (Cl2) unas dos y media veces más pesado que el aire, de olor desagradable y tóxico. Es un elemento abundante en la naturaleza que no se encuentra en estado puro ya que reacciona con rapidez con muchos elementos y compuestos químicos, por esta razón se encuentra formando parte de cloruros (especialmente en forma de cloruro de sodio, sal de mesa), cloritos y cloratos, en las minas de sal y disuelto en el agua de mar y se trata de un elemento químico esencial para muchas formas de vida.



El clorito de sodio, NaClO2 también se usa como componente en enjuagues terapéuticos, colutorios, pastas dentales, geles, aerosoles para boca y también en la disolución para la limpieza de lentes de contacto. También se utiliza para la desinfección de conductos de aire y de HVAC/R y sistemas de las áreas de contención de animales (paredes, pisos, y otras superficies).

En síntesis orgánica, el clorito de sodio se utiliza frecuentemente para la oxidación de aldehídos a ácidos carboxílicos. Siendo como es un fuerte oxidante puede causar síntomas clínicos similares a los del clorato de sodio, tales como: metahemoglobinemia, hemólisis, insuficiencia renal.

La confusión esencial de quienes lo promueven como remedio para diferentes padecimientos parecería partir de una o estas dos causas: la similitud fonética entre la hidroxicloroquina y el dióxido de cloro o la función potabilizadora y desinfectante adjudicada. Pero, también puede deberse a lo dicho lineas arriba acerca de su relación con los ácidos carboxílicos o simplemente porque se lo confunde con el ión clorito. Y es, además, una confusión que pone de relieve el abrumador divorcio informativo y educativo que ocurre entre legos y especialistas en cuanto a la difusión de las ciencias, una asignatura pendiente sobre todo en los llamados países en desarrollo entre los que se cuenta México y que médicos como los hermanos chilenos Rodrigo Nicolás y Juan Ignacio Veller se han esforzado por reducir, convencidos de que la única manera de multiplicar el conocimiento es compartiéndolo.


Nosotros debemos ser críticos. Nosotros como estudiantes y/o profesionales de la salud entendemos el lenguaje técnico, sabemos traducir las ideas y debemos filtrar y, a partir de ese filtro, debemos procesar de manera crítica y transmitir a las personas que no lo entienden que tienen una desinformación [o mala información]. Porque, en tiempos de pandemia, con el miedo, el estrés, con el dolor y el sufrimiento de la gente, todos nosotros somos muy susceptibles [...] a creer discursos disfrazados con palabras técnicas [...] Y yo entiendo a todas las personas que se dejan convencer por estos argumentos [...] porque recuerdo cuando yo no estudiaba medicina [...] y era muy fácil también convencerme sobre todo cuando escuchba a alguien que yo lo consideraba tal vez una autoridad en el tema [...] Muchas veces saber un poco sobre algún asunto nos hace creer que sabemos mucho [VELLER, Rodrígo Nicolás, 2020].
La confusión también puede deberse a los estudios efectuados en la literatura médica para comprender los probables usos clínicos y terapéuticos del ácido hipocloroso cuya descomposición química deriva en la emanación de dióxido de cloro. Dichos estudios existentes desde la Primera Guerra Mundial buscaron dar respuesta al alarmante incremento de muertes (situación apremiante similar a la vivida hoy con la pandemia) por infecciones en los soldados, lo que hizo que se emprendiera la búsqueda de un desinfectante aplicable de manera directa en las heridas, que destruyera microorganismos y sus toxinas, sin dañar el tejido normal.
El ácido hipocloroso forma parte de un nuevo grupo de sustancias microbicidas conocidas como "moléculas antimicrobianas no antibióticas", que por su amplio espectro, rápida acción y amplio margen de seguridad puede ser utilizado para controlar y prevenir un amplio número de infecciones de piel y mucosas. Biológicamente se clasifica dentro de un grupo de pequeñas moléculas conocidas como especies reactivas del oxígeno (ROS), sintetizadas por células del sistema inmune (neutrófilos y macrófagos) durante un proceso inmunológico conocido como "estallido respiratorio", durante la fagocitosis de antígenos en reacción con la enzima mieloperoxidasa peróxido de hidrógeno (H2O2) y un ion de cloro. Funciona como una sustancia quimiotáctica que permite un excelente control microbiano y activación del sistema de defensa que facilita la rápida e inocua reparación de tejidos [WANG et. al. 2007; cit. en (Ácido hipocloroso, 2020)].

La realidad es que ambas partes, la defensora y la acusadora del uso del producto no han presentado pruebas fehacientes, investigaciones puntuales de su efectividad en la promoción de la salud, fuera de testimonios anecdóticos sin sustento. Con lo que se cuenta en cambio es con investigaciones acerca de la toxicidad probable en plantas y animales.

En la medida que el público general se eduque apropiadamente y no solo llevado por la curiosidad o la necesidad o el miedo, los temas que pueden afectar a su salud y bienestar le serán menos onerosos tanto para su integridad física como económica. Pero, como he dicho líneas arriba, esto pasa de manera especial por el desarrollo de esas habilidades y competencias para la discriminación informativa que permitan a los lectores y consumidores de información, en este caso profesionales o no de la medicina, seleccionar lo verdaderamente útil y trascendental.

Puede ser muy valiosa una síntesis como esta o la publicada por la BBC de Londres, alertando sobre el uso del Dióxido de Cloro. Pero, al final solo el lector, solo, determina, mediante el contraste de la información, qué le sirve en su creencia y limitado conocimiento, como lo demuestran los cientos de usuarios del producto, número creciente patrocinado incluso por las iglesias proveedoras de esperanza frente a los temores palpitantes en la acualidad.

En el lector queda responder si estamos ante un choque de paradigmas o ante una teoría que ha propiciado desde 1991 el registro de algunas patentes y más recientemente la reacción regulatoria de algunos gobiernos tanto a favor como en contra de su aplicación con carácter experimental o incluso terapéutico, a veces con carácter "preventivo" y como un ¿placebo paliativo? ante la deseperada situación que enfrentan los sistemas de seguridad mundiales:


  • Patente sobre una solución estabilizada de DIÓXIDO DE CLORO para su uso como biocida universal: sustancias químicas destinadas a destruir, contrarrestar, neutralizar, impedir la acción de cualquier organismo considerado nocivo para el hombre. Patente EE.UU. 20120225135 A1 Fecha: 6/9/2012 Inventor: Tadeusz Krogulec Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/RAUFWe
  • Patente sobre la utilización de varias sustancias incluido el CLORITO DE SODIO para el tratamiento de asma alérgica, rinitis alérgica y dermatitis atópica. Patente EE.UU. 8435568 B2 Fecha: 7/5/2013 Inventores: Mathias Brosz , Friedrich-Wilhelm Kuhne ,Klaus Blaszkiewitz , Thomas Isensee Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/AEBndF
  • Patente sobre la utilización del DIÓXIDO DE CLORO para el tratamiento parenteral (vía intravenosa) de infecciones por el HIV. El objeto de la presente invención es proporcionar un agente que inactiva los virus VIH en la sangre sin tener una influencia perjudicial en el cuerpo del paciente. Patente EE.UU. 6086922 A Fecha: 19/3/1993 Inventor: Friedrich W. Kuhne Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/LJTbo8
  • Patente sobre la utilización del DIÓXIDO DE CLORO para la prevención y el tratamiento de infecciones bacterianas, incluyendo la mastitis, en la ubre de mamíferos. Las composiciones incluyen dióxido de cloro en una cantidad que varía desde 5 ppm a 1000 ppm. Patente EE.UU. 5252343 A Fecha: 12/10/1992 Inventor: Robert D. Kross Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/emKbrx
  • Patente sobre la utilización del DIÓXIDO DE CLORO para la desinfección o esterilización esencialmente de componentes de la sangre (células sanguíneas, proteínas de la sangre, etc.). La composición se forma mediante la adición de un compuesto que libera dióxido de cloro con un ácido orgánico débil. Patente EE.UU. 5019402 A Fecha: 28/5/1991 Inventores: Robert D. Kross , David I. Scheer Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/LZpqdX
  • Patente que trata sobre la utilización del DIÓXIDO DE CLORO para el control de un amplio espectro de enfermedades infecciosas en la acuicultura, incluyendo el tratamiento de animales acuáticos infectados con patógenos asociados con las enfermedades infecciosas. Los animales acuáticos infectados con un patógeno son tratados por contacto con una cantidad terapéuticamente eficaz de dióxido de cloro. Patente WO 1995018534 A1 Fecha: 05/1/1995 Inventor: Robert D Kross Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/RyszsQ
  • Patente que trata sobre la utilización del CLORITO DE SODIO para el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), el alzheimer (EA) o la esclerosis múltiple (EM) Patente EE.UU. 8029826 B2 Fecha: 04/10/2011 Inventor: Michael S. McGrath (http://goo.gl/76oy3F) Patente apoyada por el gobierno de los EEUU donde el propio gobierno puede tener derechos sobre la misma. Enlace directo Google Patents: http://goo.gl/HCPxC7






_____

Referencias y fuentes consultadas: