Clausuran vecinos parquímetros simbólicamente


VECINOS DE NAUCALPAN DE JUÁREZ clausuraron simbólica y momentáneamente parquímetros ubicados en varios puntos del municipio con cintillos en los que se leía: "Claudia Oyoque, ¡las cuentas claras! ¿Cuánto es lo recaudado entre enero y julio de 2015?

Como si fueran Daleks, aquellos terroríficos villanos extraterrestres enemigos de la humanidad en la serie de televisión inglesa Dr. Who, los parquímetros cunden aquí y allá. "¡Mira las noticias en todos lados del mundo y en varios estados de la República, son una amenaza constante al bolsillo de los contribuyentes, basta recordar como ejemplo la forma como fueron impuestos en Naucalpan de Juárez por el gobierno del ex presidente David Sánchez Guevara hoy diputado federal electo. Generan más problemas de los que resuelven", consideró un vecino naucalpense.

El 17 de julio pasado, el Primer Síndico Rafael Ranero Barrera (PRI) argumentó al diario El Universal que vecinos le habían comentado que "los parquímetros deben volver a entrar en operación, ya que cuando estaban en funcionamiento disminuyó el ambulantaje, los franeleros y la inseguridad". Estos dichos supuestos complementan pero también contradicen los alegatos de otros vecinos con los que ha tenido contacto Indicios Metropolitanos.

El cobro de tarifas por concepto de estacionamiento mediante los parquímetros lo revocó el Cabildo el 9 de enero de 2015 luego de algunos estires y aflojes, dimes y diretes con el ex presidente municipal. La infracción por este concepto también fue suspendida en el municipio el 22 de abril. A mediados de junio, luego de las elecciones, el Secretario de Seguridad Ciudadana del gobernador Eruviel Ávila, Damián Canales Mena, anunció el regreso de las multas de tránsito aun cuando un mes antes José Manzur Quiroga, Secretario de Gobierno  del Estado de México explicara que la suspensión era debido a la corrupción de los elementos policíacos. Las multas entrarían nuevamente en vigor desde el 27 de julio, pero ¿y las relacionadas con los parquímetros?

En la confusión siguen habiendo los vecinos que, temerosos o trasnochados, continúan pagando, a pesar de indicar el gobierno de Claudia Oyoque, presidenta municipal interina y siguiendo la instrucción del Cabildo que las multas por este concepto siguen suspendidas. La instrucción estatal contradice a la municipal en los hechos. El 21 de julio Oyoque declaró al diario Hoy Estado: "No tenemos ningún acuerdo, no hay acercamiento porque no hay interés en su reactivación; yo no tengo interés, pero está de por medio el contrato y éste nos obliga a retomar  el tema".

De acuerdo con la instrucción del Cabildo, la suspensión sería vigente en tanto no se diera la garantía de audiencia a la empresa Parkingmeter, misma que esta no ha solicitado y en cambio sí ha continuado recaudando lo depositado por los automovilistas en las alcancías de los aparatos. De acuerdo con el contrato, la empresa debe destinar el 40% de lo recaudado a la Tesorería para que esta a su vez haga la distribución presupuestal correspondiente.

Los vecinos de Naucalpan de Juárez se preguntan cuánto es lo recaudado de enero a julio y si esta recaudación en concreto es legal dado el hecho de la suspensión.


De anuncios y agujeros. Mientras la mata siga dando

LOS GOBIERNOS DEL ESTADO DE MÉXICO y el municipal de Naucalpan de Juárez no han otorgado ningún permiso recientemente para colocación de anuncios en el fraccionamiento La Florida o a lo largo del tramo del Periférico que es de su competencia.

“No hemos dado, no queremos dar ni planeamos dar ningún permiso para la instalación de ningún tipo de anuncio en esa zona. Al contrario, estamos revisando para erradicar muchos anuncios sobre el Periférico en general”, declaró a Indicios Metropolitanos el Ing. Juan Miguel Ramírez Suárez, Coord. de Derecho de Vía de la Junta de Caminos del Estado de México, y quien de acuerdo con la ley tiene la facultad y la atribución para emitir permisos para la instalación de anuncios publicitarios y muy especialmente aquellos dentro de la categoría de espectaculares de ciertas características en las inmediaciones del espacio considerado derecho de vía estatal.

Historia de un agujero
Como bien informara Indicios Metropolitanos en  una nota anterior, en la madrugada del 16 de julio del año en curso, alrededor de las 12 pm, vecinos del fraccionamiento La Florida, en Naucalpan de Juárez, captaron el momento cuando un grupo de trabajadores escarbaban con una excavadora y dos camiones de volteo en terreno del camellón que separa las laterales comercial del fraccionamiento y la del Periférico. Avisaron al Comisario Crnl. Alfonso Cancino quien hizo acto de presencia acompañado de una unidad Delta de Reacción Inmediata y unidades de la policía municipal. Los trabajadores fueron remitidos al juez calificador donde expusieron un amparo federal.

Los trabajadores, que no se identificaron ni a la empresa para la cual laboran ni presentaron ninguna clase de permiso, se limitaron a afirmar que contaba con la autorización del Consejo de Participación Ciudadana de La Florida, lo cual resulta en sí una mentira pues no es atribución de las autoridades auxiliares dar anuencia en estos como otros temas. Indicios Metropolitanos entrevistó a la Delegada Carmen García y ella declaró ni siquiera tener noticia sobre el particular. Días después, mediante Facebook, el presidente de COPACI La Florida, Alexiis Abascal se deslindó igualmente del hecho.



Según dicho de los trabajadores a las autoridades, se encontraban cavando un foso para la colocación de la zapata que sostendrá un anuncio espectacular, esto a pocos metros antes de la agencia de automóviles Nissan.

Un hoyo entre agujeros legales
Localmente, la Dirección de Desarrollo Urbano debería ser la única dependencia facultada para el otorgamiento de permisos de construcción y anuncios (excepto espectaculares) conforme lo establecen el Reglamento de Anuncios y los Bandos municipales respectivos de cada localidad para los que la reforma más reciente data del 5 de junio de 2008. Pero el Código Administrativo del Estado de México en su Capítulo Tercero del Libro 17 reformado al 31 de marzo de 2011 deja abierta la puerta y un vacío legal pues señala en su Capítulo Segundo que las autoridades facultadas para aplicar el mismo son, en orden de importancia: el Gobernador, el Secretario de Comunicaciones, la Junta de Caminos del Estado de México, el Sistema de Autopistas, Aeropuertos, Servicios Conexos y Auxiliares del Estado de México (SAASCAEM), el Servicio de Transporte Masivo del Estado de México y los municipios, sin especificar dentro de estos la dependencia respectiva fuera de lo señalado en los Reglamentos de Anuncios correspondientes, es decir, la Dirección de Desarrollo Urbano y dentro de ella el Departamento de Licencias de Construcción y Anuncios.

Este vacío o contradicción legal ha llevado a permisionarios, a funcionarios y ciudadanos en general a tramitar licencias, chuecos o derechos, en instancias sin atribuciones aparentes para el caso. Tal es así que al cuestionar al Jefe de Departamento de Licencias de Construcción y Anuncios de Naucalpan de Juárez sobre el tema que tratamos, luego de afirmar que no se han extendido permisos para anuncios espectaculares “echó la bolita” a la Dirección de Obras Públicas y se comprometió a realizar una inspección.

Indicios Metropolitanos interrogó al respecto a Armando de Anda, apenas en mayo nombrado Director de Obras Públicas del municipio en sustitución de quien fuera su superior, Armando López Gutiérrez, quien es hermano del vocero de la Presidencia de la República y que a su vez sustituyera a Sergio Barrera, a quien los concejales acusaron de opacidad.

Luego de la publicación de la nota por Indicios Metropolitanos esta se diseminó por las redes sociales tergiversada, dando pie a sospechas sobre la probable participación de la empresa OHL México, constructora del Viaducto Bicentenario toda vez que tiene previsto construir una rampa de desahogo de tránsito en la proximidad del lugar de la excavación.

A decir de las autoridades, las características del agujero en cuestión corresponden a las usuales para la erección de los soportes de anuncios espectaculares unipolares, es decir de un solo poste.

Una tras otra con la publicidad depredadora
No es la primera vez que ocurre que se coloquen anuncios de manera subrepticia en el Estado de México, el Distrito Federal u otras entidades de la República. En ese mismo camellón de La Florida existen otros dos anuncios, por no mencionar los que pululan alrededor de Las Torres al punto de trastocar la finalidad estética del monumento creado por el Arq. Luis Barragán y el escultor Matías Goeritz.


Uno, el más antiguo, data de varios años antes de la construcción del Viaducto Bicentenario. El propietario es la agencia Vendor, que perteneciera entre mediados de los setentas y hasta 1998 a Televisa y en la actualidad forma parte de Outfront Media (antes CBS Outdoor). Se encuentra a pocos metros del río Chico de los Remedios, al comienzo de la lateral comercial del fraccionamiento y a menos de 200 metros de la salida de incorporación del tránsito de carriles centrales del Periférico a la lateral del mismo. Esta distancia actual, resultante de la construcción del Viaducto Elevado que alteró la línea del derecho de vía original para la introducción de un carril adicional contraviene lo establecido por las leyes sobre anuncios y derecho de vía.

Otro anuncio “apareció” de la noche a la mañana hará un año y medio ―después de la construcción del Viaducto y ya recortado el camellón―, metros más adelante en la misma dirección sur a norte, frente a la zona de bancos, pocos metros antes de la parada de autobuses frente al comercio La Abeja. Este anuncio pertenece a la agencia Espectaculares Televisivos (ETV) propiedad del empresario Mario Vázquez Raña como parte del Grupo Estudios Tepeyac. Ahora, el agujero motivo de este reportaje, ¿qué agencia lo hizo?

Desde 2013 han sido una tras otra las agencias de comunicación, publicidad, mercadotecnia de todo nivel las “beneficiadas” con cuanto espacio, techo, barda libre encuentran. Esto en un comportamiento más parecido al de las voraces inmobiliarias para las que cualquier barranca, colina o baldío les resulta apetitoso.

Ya en 2013, tanto el gobierno de Marcelo Ebrard Casaubon como el entonces Secretario de Comunicaciones del Estado de México, Apolinar Mena ―obligado a renunciar a causa de los escándalos recientes alrededor de OHL― habían acusado la preocupante proliferación de anuncios misma que continúa sin control. En aquel año, Mena anunció que se harían reformas a la normatividad vigente, pero esas reformas no se han dado ni nacional ni estatalmente a no ser con parches esporádicos que en vez de resolver el problema lo agravan.

En la tierra de nadie
Esta indefinición legal ha propiciado que incluso la distinción entre los derechos de vía federal, estatal y municipal no esté clarificada.

“El recorte al camellón de La Florida supuso de forma natural que se modificara el alineamiento del terreno y por tanto que se desplazara el derecho de vía”, explicaría tiempo atrás a Indicios Metropolitanos el Ing. Morales, vecino de La Florida y quien forma parte de la Comisión Técnica que ha sostenido los diálogos con gobierno y OHL alrededor de la construcción del Viaducto para revisar los efectos del mismo sobre la comunidad.

Lo anterior conlleva a que, mientras la ley especifica que los anuncios espectaculares deben guardar una distancia mínima de cinco metros de la carpeta de la vía principal, la ubicación de los anuncios mencionados debe ser examinada, porque lo mismo que aplica para el Periférico, aplica para la avenida comercial de La Florida. Así, o los anuncios están ya fuera del derecho de vía estatal para caer en el municipal, en cuyo caso la atribución corresponde al municipio para el otorgamiento de permisos, o si están en el derecho de vía estatal desplazado no cumplen con la distancia al derecho de vía municipal convirtiéndose en un riesgo a la seguridad de las propiedades y las personas; o quedan en el justo medio, en una especie de tierra de nadie donde cualquiera puede hacer lo que le venga en gana sin necesidad de permisos engorrosos y sin pagar impuestos.

¿Dónde quedó la bolita?
Es sabido que el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) se encuentra indagando alrededor de los contratos entre la empresa Promocasting, propiedad de Yazmín Camacho Muñoz, ex funcionaria del ayuntamiento, y el gobierno municipal de Naucalpan de Juárez durante la administración de David Sánchez Guevara. La empresa, originalmente establecida como una agencia de modelos y representaciones artísticas, es también productora de videos corporativos, de espectáculos y comerciales. Lo anterior no descarta que posiblemente también esta empresa con 15 años de existencia haya o esté incursionando en la publicidad exterior toda vez que se anuncia como una buscadora de soluciones de imagen: “nos dedicamos a buscar todo lo que tú necesites para tu producción visual”, describe Lety Camacho, Directora General.

Mientras, la mata sigue dando… de qué hablar.

Fotos: Archivo VETA Creativa

La fuerza de un puñado

Pinta tu aldea y pintarás el mundo
Tolstoi

ERA DE LA OPINIÓN… de que ―y discúlpenme las cacofonías en este párrafo― los temas en común podían motivar a la acción y no nada más a la pasión; que la Unión hace la fuerza, pero tal parece que en el casino de la vida y en las maquinitas de la política mexicana la apuesta por la desintegración, la anomia, la inopia y la desmemoria va a la alza y justifica y fortalece la indiferencia social de esos pocos con alguna clase de poder, causando descrédito y menoscabo entre la gente misma. ¡Y luego nos preguntamos por qué nuestros políticos, los empresarios voraces y nuestros gobiernos oportunistas abusan de nuestra confianza!

Cuando la unión lleva al ninguneo
Recientemente, el sábado 18 de julio acudí ―y no es la primera vez― a atestiguar la “nutrida” concurrencia que asistió a una manifestación convocada por vecinos de Naucalpan de Juárez en la plancha de Las Torres de Satélite y de nuevo para protestar, solicitar, exigir a los gobiernos municipal y estatal el mejoramiento de la seguridad en el municipio.

Como otras veces, a la cita organizada llegaron los vecinos sumando la grandiosa cantidad de alrededor de 80 personas provenientes de varias colonias y fraccionamientos sobre todo residenciales de la zona, portando cartulinas y carteles alusivos al tema central, así como un gigantesco crespón con el que enlutaron el monumento.

Entre los participantes se encontraban algunos líderes vecinales, autoridades auxiliares de Participación Ciudadana, asociaciones de colonos, uno que otro medio de comunicación locales y por supuesto las policías municipal y estatal en sus funciones de vigilancia y mantenimiento del orden.
Como muchos municipios del país, Naucalpan de Juárez ha crecido tan desordenadamente que incluso no hay sitios adecuados, desde el punto de vista mediático, para reuniones con este carácter, aun cuando por su “multitudinaria asistencia” aparenten más corrillos o pic-nic que mítines con ambiciones superiores y por ello mismo den pauta a las autoridades para socarronamente tachar a los vociferantes de ser “minorías” sin importancia, pasando por alto que esas minorías, para bien o mal, como punta de lanza bien afilada representan de manera auténtica y legítima a extensas mayorías, incluso de modo más puntual y contundente que los mismos representantes populares que se supone son los legisladores.

Solo algunos puntos en la geografía urbana de Naucalpan de Juárez se prestan para “hacer ruido” y, con todo el riesgo que implica atravesar el periférico y el Viaducto Bicentenario, los vecinos siguen eligiendo lugares como las emblemáticas Torres de Satélite para manifestarse y que sus demandas tengan visibilidad por aire y tierra.

Cruzar la vialidad en sí ya es una forma de llamar la atención, pero la prisa de los automovilistas reduce el tiempo de esta y por lo tanto merma la posibilidad de un impacto memorable en la sociedad.

No faltan los que proponen cerrar el Periférico no nada más para trazar un puente de cruce ―¡imagina, lector, una larga fila de pobladores atravesando de oriente a poniente el Periférico, mejor que caminarlo de sur a norte, digamos, justo en ese punto de Las Torres!―, sino para sustituir los ruidos de los motores con las voces de la ciudadanía como han hecho otros grupos por ejemplo en los paros carreteros, pero eso, que yo recuerde, solo ha sucedido dos veces entre 2010 y la fecha, la primera de ellas cuando vecinos de La Florida contuvieron las obras de construcción del Viaducto Bicentenario. A veces, ser respetuosos de los derechos de terceros solo conduce al ninguneo por parte de esos mismos terceros, conciudadanos o gobernantes.


No basta, me va quedando claro, que el afán de unos pocos ciudadanos conscientes, comprometidos, por mucha influencia que puedan tener sobre sus grupos y comunidades no siempre permea a los individuos que las conforman. La gente siempre es la gente y nunca cambiará, reza la canción, y de ahí que todo siga más o menos igual ―me refiero a la de Sergio Esquivel, que cantara Víctor Iturbe “El Pirulí” en el OTI de 1978, no a “La Vida sigue igual” interpretada por Julio Iglesias ni al tema del grupo argentino de rock Viejas Locas.







Protestando, que es gerundio
Los mexicanos tenemos una larga historia dedicada a construir una imagen de quejosos o, para ser más certero, de quejumbrosos. Chillamos, pataleamos, vociferamos hasta porque voló la mosca, pero cuando se convoca a jalar parejo, a clamar y reclamar en conjunto, ya a éste o ese otro, a Chucha o a Juan se les atraviesa algún compromiso siempre “previamente definido” aun cuando no pase de un mero pretexto. Claro, hay razones de peso, respetables y quizá de último momento que pueden detener al mejor intencionado, eso no lo pongo en duda, no obstante cuando de entre los convocantes alguno o algunos, como se dice coloquialmente, echan la piedra y esconden la mano, eso ya es otra cosa.

A lo anterior súmese la inclinación ya muy característica en nuestra identidad de conmovernos y aplaudir frente a los que aparentan debilidad sin por ello mostrarnos solidarios de veras o por causa de quienes en rebeldía confrontan y ridiculizan a la figura de autoridad, como el “admirable” Chapo Guzmán, y el asunto se agrava.

Contrastando manifestaciones como la descrita con las abultadas concurrencias convocadas por algunos candidatos en las pasadas elecciones o aquellas gigantescas marchas por la paz de hace unos años, uno no puede dejar de preguntarse qué debe suceder para que el hastío propicie movilizaciones de gran envergadura, voluntarias y no como una suma de acarreados con esperanza de sacar algún provecho particular. Y lo hemos visto. ¿Tienen que desaparecer simbólicos 43 normalistas? ¿Tienen que ser vejadas y asesinadas numerosas mujeres e infantes? ¿Tienen que ser secuestrados más hijos de poetas o empresarios? ¿Qué se necesita ya no para sacudir el miedo sino la apatía sin que protestar derive en ocasión para la chorcha y las relaciones públicas o hasta púbicas?

Entre alertas y chismes
Mientras Enrique Peña Nieto fue gobernador del Estado de México nunca se quisieron “reconocer” los feminicidios como un dato de alarma. Ahora, ¡qué casualidad!, siendo gobernador el rival político Eruviel Ávila, este dato se emite como alerta en vista del acusado alto índice de feminicidios en la entidad donde ocurre el 20% y siendo Ecatepec, de donde fuera presidente municipal el hoy gobernador el que presenta más casos. ¿Quién quiere golpear a quién? La alerta puede traer jiribilla. ¿Pretende restar poder a Eruviel que aspira a la presidencia? ¿O pretende echar sal en la herida del presidente señalado sin pruebas claras de haber golpeado a la primera dama Angélica Rivera y de haber asesinado a su esposa Mónica Pretelini?

Es sabido y el mismo Peña Nieto lo confesó en 2012 a la periodista Katia D’Artigues, estando casado sostuvo un par de relaciones extra maritales, una con la también funcionaria en el gobierno de Arturo Montiel, Maritza Díaz Hernández y luego con su colaboradora de campaña para la gubernatura, Yessica de Lamadrid Téllez, con quienes procreó un par de hijos, el segundo de los cuales falleció de cáncer. Y diversos medios han documentado otras presumibles novias y amantes previas a su segundo matrimonio (cf. "Las mujeres de Peña Nieto"). En tanto figura pública no podía escaparse del chismorreo.

Cierta fuente que conoció a Peña Nieto en una entonces muy conocida casa de citas a la que acudían famosos políticos, alguno incluso ahora en el gabinete presidencial, contó a Indicios Metropolitanos una versión que contrasta con las manejadas en los medios, incluidas las acusaciones del vejado homosexual profesor Agustín Estrada Negrete quien afirmó haber sido amante del copetudo caballero: la aguerrida Mónica Pretelini Sáenz habría reaccionado a la infidelidad del influyente marido enredándose sentimentalmente con cierto ex tenista y empresario veracruzano. Ello derivaría en la muerte de la mujer, ocurrida en enero de 2007 y, cuatro meses después, en el asesinato ¡en Veracruz! de 4 escoltas personales del ya gobernador como comienzo de un conjunto de tramas que narrarían fraudes cuantiosos y relaciones oscuras entre la iniciativa privada, sindicatos y delincuencia organizada de cuello blanco.

Novelas conspiratorias y digresiones aparte, lo anterior se relaciona con lo que vengo apuntando porque la dispersión de los gritos y los señalamientos, aun teniendo el mismo volumen los vuelve simple ruido intrascendente, al menos para quienes en la posibilidad de dar soluciones concretas a los problemas de la sociedad prefieren mirar de soslayo y tachar de grupúsculos o sea menos que nada a esos voceros y vindicadores de las causas del Pueblo.

La poderosa estupidez
Pesa en el aire la idea de la ausencia de líderes. No la creo. Los hay, pero la que he dado en llamar opinioncracia parece imperar con tanto poder que los esfuerzos loables de estos terminan diluidos y dispersos en una comunidad apática que ha preferido refugiarse en la comodidad de las redes sociales, desvirtuando el potencial que estas ofrecen, compartiendo más banalidades en vez de propiciar el cambio y la unidad sociales.

Acusamos que tal o cual hecho o noticia suceden de manera perversa y concertada para distraernos de lo verdaderamente importante, no obstante más pronto que tarde seguimos el juego.

En la bondad esencial, por ejemplo, de los memes sustitutos en cierto modo de los cartones y las pintas ―porque ahora no es necesario ser cartonista famoso ni grafitero para hacerlos―, cualquier ocurrencia cabe.


Nos indigna casi todo, la fuga del Chapo tanto como los tropiezos de Enrique Peña Nieto, y hacemos mofa de uno a través de la burla del otro y en el proceso ensalzamos a uno mientras vilipendiamos al otro, sin percatarnos que en la construcción de los significados y de la opinión pública y en lo que esta aporta para el desarrollo social, todos acabamos escupiendo al cielo y cargando el opaco velo del vituperio en el propio ojo. Es cómodo señalar a quien personifica la autoridad, pero ¿quién nos señala a ti y a mí en nuestra mezquina forma de actuar o ser omisos?

De la vapuleada y disminuida clase media para arriba solo se mira por los intereses creados, es raro que se organice la gente ya no digamos para una manifestación sino para defender los derechos comunes. Aun con un nivel sociocultural determinado, con conocimiento aparente de las causas y los efectos, los afanes de los “notables” se esfuman tan pronto como los exclaman.

Hacia abajo, en los círculos más humildes, hay más idea de comunión, incluso más coraje pero este puede ser tanto que deriva en la bravura y la necedad.

Aun pudiendo haber fastidio compartido por el estado de las cosas, entre ambos niveles sociales, incapaces de conciliar para el bien común salvo en raras y honrosas excepciones, se va escribiendo el drama diario de nuestra historia, una en que la estupidez despliega alegremente todo su poderío y cinismo.

No se lea esto como una apología de los héroes ni de los villanos, de víctimas ni de victimarios, cualesquiera que puedan ser en la telenovela del día a día. Mucha de la culpa de lo que sucede a México es sin duda nuestra, sí, tuya y mía, y no estoy parafraseando al infame Donald Trump aunque no deja de tener razón. Por dejados, por convenencieros egoístas más pendientes de la oportunidad de sacar raja que de hacer justicia más allá de los bueyes del compadre.

¿O será que ya leo mal los indicios de lo que pasa en mi país, en mi localidad y resulta que no es por las multitudes y las mayorías, sino por una runfla, una caterva, una camarilla, una canalla, un puñado de individuos que el país se mueve? Un puñado controla la economía. Una canalla controla la política. El hampa controla las conciencias. ¿Y el resto de los millones de mexicanos qué hacemos aparte de sobrevivir, de soportar, lo que ya es decir mucho dadas las circunstancias?

México se está moviendo, sin duda, pero su movimiento es tan imperceptible en su lentitud ―¡y lo que falta!― que seguimos pensando y actuando como si fuera ayer.

Fotos: Archivo VETA Creativa y Mauricio Rojas