Primero el exalcalde, ahora un exdirector
Elías Manuel Prieto, David Sánchez Guevara y René Palomares |
Agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de
México (PGJEM) detuvieron el 8 de marzo al exdirector de OAPAS Naucalpan, Ing.
Elías Manuel Prieto López, luego de nueve meses de estar prófugo y haberse
librado la orden judicial tras la denuncia presentada por el exsíndico Rafael
Ranero Barrera durante el interinato de la exalcaldesa Claudia Oyoque.
El ingeniero Prieto López es presunto culpable del desvío de
60 millones de pesos de recursos públicos distraídos en fondos de inversión en
Multiva y Ficrea, institución esta última que, tras disolverse, provocó la quiebra
de numerosas familias. Su aprehensión se suma a la del exalcalde David Sánchez
Guevara, hoy preso desde el 20 de agosto de 2015 bajo la acusación de peculado.
En septiembre de 2014 supuestamente habría firmado un
contrato con Banco Multiva, con el objetivo de que esta institución
administrara recursos del OAPAS, para contribuir a la mejora de los
rendimientos e incrementar el monto original de la inversión para el pago de
los trabajadores de ese organismo en diciembre de 2014. y no incurrir en impago
como ya había sucedido al final de la administración inmediata anterior de
Azucena Olivares.
Destaca
Rebeca Jiménez de El Universal, “fuentes cercanas a la investigación
señalaron que el fondo “estaba impedido para recibir depósitos provenientes de
organismos auxiliares municipales”.
Falta ver las conexiones de este caso con otros dos, por lo
pronto: el propio del exalcalde David Sánchez Guevara, quien enfrenta tres
procesos sobre manejos irregulares de recursos públicos; y el de su antecesora,
la exalcaldesa Azucena Olivares, contra la que el Sindicato Único de
Trabajadores del Estado de México y Municipios (SUTEyM), en su capítulo
Naucalpan, efectuó una demanda penal en 2013 por el desvío de 8 millones de los
fondos de los recursos y caja de ahorro de los trabajadores del ayuntamiento.
Aquí en mis Indicios Metropolitanos informé
que había yo realizado la solicitud a la PGJEM vía SAIMEX para conocer el
estado que guarda la carpeta de investigación del caso Azucena Olivares y, de
la respuesta ya obtenida y que comparto más abajo, concluyo que la misma se
haya archivada y, quizá, durmiendo el sueño de los “injustos”, en espera de que
transcurran otros seis años para que todo quede olvidado.
No obstante, la respuesta ha servido para:
- Desmentir a la diputada Irazema González Olivares quien —en entrevista a Indicios Metropolitanos—, declaró la inexistencia de la citada demanda y que, en todo caso, el adeudo a los trabajadores ya se había pagado (sí, esto último ocurrió, pero en el comienzo de la administración de Sánchez Guevara y a trompicones).
- Corregir el dato publicado por la colega Rebeca Jiménez quien en su nota original sobre la demanda anotó con error de una cifra el número de expediente de investigación.
- Llamar la atención a los actores y a la opinión pública interesados en el caso, empezando por el mismo demandante, el Secretario General del SUTEyM Naucalpan, René Palomares Parra y sus abogados, para que den seguimiento a la misma investigación, pues mientras la parte demandante no mueva un dedo ya hacia el retiro de los cargos o la consecución de las pesquisas, la Procuraduría no hará lo consecuente sino en la medida de sus tiempos y esfuerzos. Son sintomáticas de ¿dejadez? las respuestas dadas a Indicios Metropolitanos tiempo atrás por el líder sindical y el abogado Javier Chávez Tello, el primero en simplemente “echar la bolita” a la PGJEM y el segundo en solo decir “quién sabe, ha de estar archivada la carpeta”. ¿De qué se trata? ¿De jugar al gato y al ratón en el tablero de la impunidad? ¿O todo fue un teatro orquestado, pero con qué fin? Respuestas a estas y otras preguntas pueden además aclarar si, como sospechan los abogados y la esposa de David Sánchez Guevara, el exalcalde es el pagano, el chivo —como dije— más propiciatorio que expiatorio.
Lo cierto es que —como he comentado a funcionarios de la
administración municipal de Edgar Olvera— al alcalde de ahora le conviene más
ir desafanándose de forma prístina de todos aquellos vínculos que, sospechas
fundadas o no, lo ligan con Azucena Olivares y su círculo. No hacerlo y pronto,
incidiendo, cooperando con la causa iniciada por el sindicato tres años atrás,
podría acarrearle un frente de conflicto adicional a los ya abiertos como resabios
de la contienda electoral contra David Parra Sánchez, ahora ubicado en un cargo
políticamente clave, aunque de apariencia menor, como lo es la gerencia de
Liconsa Metropolitana Sur.
René Palomares Parra mostrando la demanda contra la alcaldesa Azucena Olivares. Foto: El Universal |
Dicha división es, a querer o no, la misma que nutre declaraciones y posturas como la expresada por la esposa del alcalde Olvera y presidenta del DIF Naucalpan, Liliana Carbajal, durante una reunión con grupos Rotarios el 24 de febrero de 2016, en la que arremetió contra la cúpula sindical como destacaré en un artículo próximo a publicar.