El escalón que falta 1. Del dicho al hecho



ERA DE LA OPINIÓN… que con la intervención del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) por virtud de un convenio promovido por el gobierno municipal presidido por Edgar Olvera Higuera, las cosas podrían ser distintas en lo tocante a la participación ciudadana, pero todo apunta a que los comicios que en próximos días se efectuarán en los municipios del Estado de México para elegir Consejos y Delegaciones de Participación Ciudadana podrían resultar, como antes y siempre, amañadas, no precisamente por causas perversas achacables al actual alcalde, sino quizá más bien por torpeza general del cabildo ignorante de los huecos legales preexistentes. Pero antes de entrar en materia quiero recordar lo expuesto por Alberto Olvera —vaya coincidencia con el presidente municipal naucalpense— en 2009 al respecto:

Uno de los rasgos más interesantes de la dilatada e incompleta transición a la democracia en México es el uso que se la ha dado a la innovación legal. El carácter centralmente electoral de la transición, con sus constantes conflictos postelectorales y sus inacabables reformas en las reglas e instituciones electorales, hizo que se perdiera de vista que hay otros terrenos en los que se han tratado de abrir nuevas avenidas a la democratización de la vida pública.
Tal es el caso de las leyes de participación ciudadana. Poco visibles y ciertamente poco trascendentes aún en la vida política nacional y local, estas leyes han sido uno de los terrenos de innovación legal más relevantes. Y lo son porque todas las democracias operativas del mundo tienen instrumentos de participación política que trascienden el escenario meramente electoral. Resaltan los mecanismos de democracia directa: plebiscito, referéndum e iniciativa ciudadana, que en diversas modalidades se incluyen en las constituciones o en leyes secundarias en buena parte del mundo. Ciertamente, por su propio carácter excepcional, es decir, por ser instrumentos de decisión última sobre asuntos de trascendencia nacional o local, estas formas de participación ciudadana han sido usadas con poca frecuencia en la historia. Además, no dejan de ser ambiguas en sus alcances democráticos. (OLVERA & CILANO, 2009).

Desafortunadamente, en lo tocante a México, esas figuras como la “consulta popular” ya incluida en nuestra Carta Magna, no son vinculantes, es decir que no obligan a los gobiernos a acatar la voluntad ciudadana como sí se supone que sucede con el voto específico para elegir cargos de función pública (remunerada con base en el erario mismo).
En 2013, junto con algunos amigos y vecinos conformé una planilla para competir en mi localidad por los cargos de representación vecinal y autoridades auxiliares del ayuntamiento conocidos como Consejos de Participación Ciudadana (COPACI) y Delegaciones de Participación Ciudadana. Los detalles de la anécdota poco importan fuera de que la mayoría habíamos conformado tiempo atrás la Comisión Técnica de Vecinos de La Florida que sostuvo las gestiones y diálogos con la dependencia del gobierno del Estado de México (SAASCAEM) y las empresas encargadas de construir el Viaducto Bicentenario, toda vez que implicaba diversas afectaciones sobre el fraccionamiento que habito y en general la zona aledaña. La experiencia fue tanto fructífera como frustrante.

Fructífera por el conocimiento que conlleva de diversos aspectos por los cuales se logra comprender el estado de las cosas y los alcances que uno, como ciudadano, puede adquirir cuando se inserta en la práctica política de lleno y no solo como un elector que observa de lejos.

Frustrante como suele suceder cuando uno topa con la pared. En este caso la pared llena de huecos legales por los que toda la luz se filtra y ciega y distorsiona la realidad, aun siendo parte de la misma. Huecos que hacen permisiva la “corrupción involuntaria” tras la conformación de planillas a modo del gobierno municipal en turno. Huecos por donde se cuela el afán de ciertos grupos de poder para controlar los destinos de la población gobernada. Huecos por los que la mano del gobierno ase la del ciudadano, no para guiarla, sino para coartarla al convertirse en el “gran elector” con funciones de organizador, juez y parte. Huecos, también, consecuencia de la apatía de los conciudadanos cuya enjundia al calor de la circunstancia termina enfriándose con el paso de los días hasta convertirse en franca indiferencia.

Los COPACI y los Delegados no son, de suyo y por indefinición de la constitución estatal del Estado de México, ni miembros del ayuntamiento ni funcionarios públicos, sino apenas parte mínima y extensiva de la estructura descentralizada de la administración pública. Sin embargo, la actual Ley Orgánica Municipal del Estado de México en su Título III, Capítulo Cuarto sí define de tal modo, para el caso de los delegados, que estos son además autoridades auxiliares o, dicho con crudeza, seudofuncionarios públicos sublimitados en sus funciones, además de ser cargos honorarios, es decir sin goce de sueldo, lo que ya implica un desequilibrio para quienes aspiran a servir (o servirse) desde esa posición de empoderamiento (que no de poder), pues todo gasto relativo a sus gestiones y trámites han de subsanarlos de su peculio, a menos que hagan entre sus “vecinos representados” la común “coperacha”.

Artículo 27.- Las Autoridades Auxiliares ejercerán en sus respectivas jurisdicciones, las atribuciones que les confiera el Ayuntamiento y las disposiciones jurídicas aplicables, para coadyuvar en la conservación del orden, la tranquilidad, la paz pública, la seguridad y la protección de los habitantes de su respectiva comunidad.
Asimismo, podrán coordinarse con la Dependencia o Entidad de la Administración Pública Municipal correspondiente, para la planeación de programas que sean necesarios para el desarrollo de su comunidad. Los trámites y gestiones que realicen las Autoridades Auxiliares serán gratuitos y en el desempeño de su labor no recibirán remuneración alguna.
Artículo 28.- Los integrantes de los Consejos de Participación Ciudadana y las Autoridades Auxiliares a que se refiere el presente Capítulo, estarán sujetos a las disposiciones aplicables de la Ley Orgánica Municipal del Estado de México y la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de México y Municipios.
Tratándose de Delegados y Subdelegados se aplicarán las mismas normas generales de los Consejos de Participación Ciudadana respecto a la elección, duración del cargo, remoción y suplencia, contempladas en la normatividad de la materia; asimismo, los Delegados, Subdelegados e integrantes de los Consejos no podrán ser reelectos para el período inmediato siguiente [cf. (ESTADO DE MÉXICO / Naucalpan de Juárez, 2013): Título segundo, Capítulo Tercero; (LI LEGISLATURA DEL ESTADO DE MÉXICO, 1992): Título III, Capítulos Cuarto y Quinto].
En su exposición de motivos, La ley Orgánica Municipal del Estado de México apuntaba ya en 1992:

A pesar de sus limitaciones de recursos, los ayuntamientos y sus comunidades están en marcha, pero es evidente que debe fortalecerse aún más la capacidad de actuar, decidir y gestionar de los ayuntamientos; propiciar una mayor participación ciudadana en una gama más amplia de actividades y tareas de la vida pública municipal; e incrementar los mecanismos y vías de coordinación y apoyo que puede y debe aportar el Gobierno del Estado.
[Por lo que en esta Ley …] Se estipula con toda precisión que la elección de los Consejos de Participación Ciudadana Municipal debe efectuarse en los plazos que establece la ley; y, en su caso, de acuerdo a los calendarios complementarios que determine el ayuntamiento, señalándose como fecha inicial el último domingo de enero del primer año de la administración municipal y como fecha límite el 21 de marzo del propio año.
[Además…] Se amplían los cauces de participación para los vecinos, con la reestructuración de la integración y atribuciones de las comisiones de planeación para el desarrollo, adecuándose su terminología jurídica y facultando a los ayuntamientos para que al inicio de su período constitucional, las integren con presidentes de los consejos de participación ciudadana municipal y con personas representativas de la colectividad y/o que tengan un conocimiento técnico especializado de los asuntos de que éstas se ocuparán [op.cit.].

Uno de los motivos no escritos para la creación, en aquellos años noventa de los Consejos de Participación Ciudadana fue la crisis, podemos decir, de imagen y funcionalidad representativa de las cámaras y asociaciones empresariales y vecinales, crisis que llevó a la gente a relacionar el corporativismo sindicalista y su corrupción subyacente con los juegos de intereses propios de la partidocracia.

Los Consejos de Participación Ciudadana fueron pensados entonces como el brazo extensivo de la sociedad sobre las gestiones de gobierno; mientras, las Delegaciones vinieron a ser el brazo extensivo del gobierno para mediar y detectar las necesidades sociales.

En el Estado de México —como en otras regiones del país—, las asociaciones de colonos y vecinales empezaron a perder adeptos, y esto se reflejó no nada más en la baja recaudación de fondos, sino de manera especial en la discutible representación de los intereses y necesidades de la población agremiada, los que fueron absorbidos o puestos al servicio del status quo político en medio de jalones y riñas por el poder.

Cada vez más llenas de problemas, asociaciones como la de Ciudad Satélite se volvieron cebo y premio para individuos y grupos que las cooptaron, con más afán de poder y lucro en vez de servicio a la comunidad, lo que derivó en el deterioro de la calidad de vida municipal por medio del otorgamiento de permisos a mansalva para cambiar usos de suelo y construir desordenadamente, prodigar el ambulantaje, abandonar el mantenimiento preventivo de calles, avenidas, parques, los que poco a poco fueron tomados por la delincuencia, así la investida con uniforme como la embozada con el antifaz del oportunismo.

La Asociación de Colonos de La Florida, fraccionamiento que habito, se vio envuelta hará unos veinte años en diversos líos legales, demandas y arrebatos que llevaron a que, detalles más o menos, por sentencia de un juez, la presidencia de la misma quedara en manos el Ing. Carlos González, un exempleado de la Compañía de Luz y Fuerza, vecino que, si por una parte trató de contener los aviesos intereses que tienen la mira puesta sobre La Florida, también por torpezas de carácter acabó por dividir la ya de por sí debilitada asociación, la que incluso terminó con instalaciones embargadas por el ayuntamiento, con deudas pesadas por sueldos caídos, y un largo etcétera.

El ingeniero pretendió pasar la estafeta a mí tanto como a otros vecinos en varias ocasiones, pero ninguno le quisimos entrar a la rifa del tigre.

Cuando surgieron los COPACIs, también buscó enamorarnos a algunos, para que nos involucráramos de modo que fuéramos el contrapeso faltante en la colonia. Ahí sí, de entonces a la fecha, varios le entraron, si bien no todos con las mejores intenciones y procederes. En fecha tan próxima como diciembre de 2016 falleció el mencionado ingeniero González y ello, hoy, deja a la asociación en el limbo, acéfala.

Lo anterior ya lo veíamos venir los miembros de la Comisión mentada. A solicitud de los vecinos reunidos en asamblea y por requerimiento condicionante del gobierno estatal entonces gobernado por el hoy Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, conformamos la Asociación Defiende a La Florida A.C., con la finalidad de asentar un órgano más consolidado que la Comisión para representar a los vecinos en aquellas pláticas con gobierno y empresas como OHL.

Luego de construido el Viaducto Bicentenario con menos afectaciones de las que originalmente tenía el proyecto —aunque no faltan las voces críticas que clamaban el “todo o nada”—, calmadas las aguas, los vecinos en general se olvidaron de Defiende a La Florida, la que está ahí, como en el limbo también, pero latente. Algunos miembros de aquella comisión consideramos pertinente dar un giro y crear un grupo que unificara a otros de todo Naucalpan con el mismo interés de hacer del municipio un mejor lugar dónde vivir y trabajar.

Felipe Peralta Trillo explica a Indicios Metropolitanos y sus lectores esta parte de la historia.

Vendaval causa muerte y destrucción

LAS INUSUALES MALAS CONDICIONES del clima en la zona centro del país ocasionaron en la Ciudad de México y la Zona Metropolitana muerte y destrucción.

La caída de anuncios publicitarios espectaculares, de anuncios de nomenclaturas, semáforos, áboles ocasionaron caos en las principales vialidades de la zona y contrastaron, por otra parte con la maravilla del múltiples arco iris que pudo atestiguar la población.

Debido a las condiciones climatológicas que se han presentado en las últimas horas y ante el pronóstico de que la velocidad del viento aumentará, las autoridades educativas confirmaron la suspensión de clases para este jueves en las escuelas de todos los niveles en el Estado de México.

El director de Educación del gobierno de Naucalpan, Eynar de los Cobos, confirmó que el gobierno estatal suspendió clases en escuelas públicas y privadas, como medida preventiva para disminuir riesgo y salvaguardar la integridad de los estudiantes.

Hizo un llamado a los naucalpenses a evitar, en lo posible, salir a las calles  y tomar las medidas necesarias para evitar riesgos.

El funcionario precisó que conforme se presenten las condiciones climatológicas en el transcurso de este jueves se informará a la población si esta medida se mantiene por más días.

Por otra parte, tristemente los desastres evidenciaron una vez más el desorden normativo que ha supuesto el incremento desmedido en la colocación "irregular" de anuncios publicitarios por todos lados y los que, pese a denuncias de la ciudadanía, ni gobierno del Estado de México ni los gobiernos municipales han corregido con puntualidad.

La Dirección General de Protección Civil y Bomberos trabajó en coordinación con varias dependencias para atender la caída de árboles y afectaciones por la lluvia y fuertes vientos registrados este miércoles en diversos puntos del municipio de Naucalpan, contabilizando poco más de
70 árboles caídos en vialidades ubicadas en colonias como: Tecamachalco, Lomas Verdes, Río Hondo, Independencia, Los Remedios y Satélite.

Protección Civil informó que los principales problemas se registraron sobre Camino Arenero, en donde un árbol cayó sobre dos vehículos, en tanto que sobre Gustavo Baz se registró la caída de un eucalipto de aproximadamente 15 metros de altura, afectando dos vehículos particulares.

En Metepec, sin embargo, un anuncio espectacular cayó sobre dos automóviles ocasionando la muerte de sus ocupantes. Sobre Periférico norte, frente a Las Torres de Satélite, un anuncio de nomenclatura fue derribado por el viento, golpeando un vehículo y por lo menos 5 de los anuncios espectaculares sobre el tramo frente al Parque Naucalli resultaron dañados, la lona de uno de ellos quedó atravesada sobre la vialidad ocasionando caos por cerca de una hora.


Infernal hermosura... Entrevistas encadenadas

(Fragmento de mi ensayo Infernal hermosura sobre el tema de "El Chapo" que vengo escribiendo y publicaré pronto. Entre las fuentes destacables abajo incluyo y comparto tres entrevistas, dos de Adela Micha a la supuesta hija de "El Chapo" Rosa Isela Guzmán Ortiz, al reportero que entrevistó a esta para The Guardian y un fragmento de la entrevista que éste hizo a la misma luego de las declaraciones de Emma Coronel descalificándola y desconociéndola.)

EN MEDIO DE LOS DIMES Y DIRETES alrededor del caso de “El Chapo”, a las declaraciones de Emma Coronel siguió la efervescente “batalla mediática” de los familiares de “El Chapo” orquestada por sus abogados y la amenazante declaración de parte de uno de ellos, José Luis González Meza, sobre publicar pruebas e información sensible relacionada con las aportaciones financieras del narcotraficante a políticos mexicanos, calificando al presidente Enrique Peña Nieto de “asesino” (ZERMEÑO, 2016).

También, a las declaraciones de Emma Coronel y de Rosa Isela Guzmán Ortiz (GUZMÁN Ortiz, 2016) siguió una polémica cargada de descalificaciones sobre la identidad de la que pronto dieron en llamar los colegas periodistas “la supuesta hija de ‘El Chapo’”, pero también sobre la veracidad de los dichos de la primera. Hijos de “El Chapo” tuitearon al respecto, como Iván Guzmán quien aseveró en su cuenta de Twitter el 4 de marzo: “Las Noticias siempre inventan cosas de mi padre para poder vender, desconozco a la supuesta hija, como es falsa la traición del señor Mayo”, publicaciones a las que, de otro lado, supuestos simpatizantes del capo (GENTE DEL CHAPO, 2016) se adhirieron como quien espera instrucciones para actuar.



Noticiarios caracterizados por especializarse en la nota sensacionalista como Al Rojo Vivo de la cadena Telemundo acudió a entrevistar a “especialistas” para “analizar” el trasfondo de verdad de las declaraciones (GONZÁLEZ, 2016) mediante el estudio de la comunicación no verbal, tal como sucede en la trama de la serie televisiva Lie to me inspirada en las investigaciones científicas del psicólogo Paul Ekman, uno de los científicos más destacados del siglo XX pionero en el estudio de  las conexiones existentes entre los estados emocionales y las expresiones faciales [cf. (EKMAN, 2004), (EKMAN, "Entrevista a Paul Ekman", 2005)],  concluyendo de bote pronto que Emma Coronel es una mujer frágil que habría visto en “El Chapo” a su protector y que, por ser tan emocional, en lo futuro podría tener una vida difícil que la orillare a buscar una pareja similar, por lo menos en carácter, al narcotraficante.

De nuevo, en medio de la opinioncracia que nos caracteriza, no faltaron quienes se colgaron de la historia para llevar agua a su molino. Medios institucionalizados, blogs, personas con altos o regulares raitings en canales de streaming hicieron su agosto al tener, todos, un tema candente, sabroso, tuétano del cual hablar para atraer lectores, audiencia. Algunos de ellos, tomando con seriedad su giro comunicativo ponderaron y juzgaron a los actores. Los “inspirados” por fuerzas naturales no escaparon a la tentación de aseverar, por ejemplo:

Las cartas me dicen que […] cada palabra que salió de sus labios son las mentiras más grandes que le han tocado decir a ell a[Emma Coronel] en su vida, en público, y respecto a su marido. 

[…] Lo que yo tengo que descubrir es cuál es la razón de esas mentiras tan garrafales que dijo; pues todos sabemos, por todos los medios de comunicación, lo que se ha ventilado alrededor de la vida del señor Guzmán […La razón] de esta entrevista fue para confundir al pueblo y hacer creer a la gente todo lo contrario de lo que va a suceder. […] Lo que estoy viendo aquí [en las cartas] va a ser histórico: […Funcionarios involucrados y sus abogados] han formulado una gran nube negra con la que harán ver a “El Chapo” como un persona muy enferma, delicada de salud [para propiciar su tercer escape pronosticado …] del que más sabe el señor Peña Nieto […] Pero ese hombre [“El Chapo” …] aquí me sale que está sano y que está […] muy alerta, calculando cada paso […] El gobierno de México no lo va a extraditar porque tiene miedo de las cosas que él puede decir; y a “El Chapo” no le conviene que lo extraditen porque en Estados Unidos recibiría trato como un delincuente más […] 

No se sorprendan si […] mañana declaran al “Chapo” muerto por un infarto; o muy grave que lo tengan que llevar a un hospital […] (ALICIA "La Psíquica", "Las grandes mentiras de Emma Coronel", 2016).
Afirmaciones semejantes, que han apostado a una muerte fingida del capo del narcotráfico —y a la fecha de escribir estas líneas está por verse—, sobre que “se estaría cocinando una tercera y muy fina fuga” de “El Chapo” han incidido todavía más en la confusión mediática, al descrédito, a las teorías conspiratorias y extendiendo una espesa humareda tras la que solo el prejuicio y la incertidumbre han encontrado su camino.

Las especulaciones alrededor de los efectos y la conveniencia de extraditar al narcotraficante, también hicieron acto de presencia en la opinión pública, de la mano del imaginario colectivo que gusta de ver el sistema judicial norteamericano como uno de película, incorruptible, infalible, justo, cuando en la realidad no es así. Muy rara vez sabemos en el mundo sobre la aprehensión de algún mafioso del país del norte y cuando llega a ocurrir parecería que todos los malos fueran de origen extranjero, ya rusos, latino o afroamericanos, chinos, japoneses.

El discurso hollywoodense que ha investido de santidad impoluta a los personajes de corte policiaco y militar, los “Rambos”, los “duros de matar”, las estrategias políticas estadounidenses tendientes a prohijar la idea de hacer de ese país el policía del orbe para instaurar su “nuevo orden mundial” a modo ha conseguido permear en la mentalidad de muchos individuos, todo eso ha hecho del mito del “sueño americano” la manzana de la discordia para oriundos como para migrantes, atizando la xenofobia rampante en la que personajes populistas como Donald Trump se supieron montar para granjearse la aprobación popular de los sectores más recalcitrantes. Ya esto lo había acusado desde mediados la década de 1990 el documentalista y cineasta Michael Francis Moore en sus obras en las que exhibía la decadencia del imperio capitalista en contraste con la realidad estadounidense.