5 DE JULIO, ¡ZAPATO?
He venido escuchando y leyendo a diestra y siniestra definiciones que van y vienen sobre el voto nulo y el voto blanco. Sin olvidar que en estos espacios de Indicios Magazín-e fue publicado el texto que parece haber detonado la bomba que ahora tiene temblando a los políticos mexicanos, una cosa me queda clara: el Paréntesis se abrió y no tiene para cuándo cerrarse.
De entre todas las opiniones quiero destacar las vertidas en más de una ocasión por Jacobo Zabludovsky tanto en su programa radiofónico De Una a Tres que transmite Grupo Radio Centro por sus frecuencias 690 de AM y 88.1 FM, como en su columna Bucareli que publica el Diario mexicano El Universal, donde esta columna Paréntesis vio y dejó de ver la luz hace ya varios años, como destaqué en el artículo que le dio vida en esta su versión en línea.
Don Jacobo, independientemente de mi admiración por él, es de los pocos que tienen claro el significado y el valor legal, moral y humano de las opciones de voto denominadas VOTO NULO y VOTO BLANCO. Acaso le ha faltado precisar algunos detalles para orientar mejor a su vasta audiencia. Para ayudarle, Indicios Magazín-e le ha hecho llegar una colaboración mínima extraída de nuestra sección Tiempo y Destiempo que también invitamos a nuestros lectores a revisar detenidamente con la idea de aprender a votar de manera efectiva.
Al margen de estas notas y para ampliar un poco el Paréntesis valga decir que se avizora en el futuro cercano un SEÑOR ZAPATO que calzará a la democracia mexicana y hará que la zapatilla de La Cenicienta se vea más que deslustrada en los pies de los partidos y candidatos actuales.
Más allá de su uso conceptual en el juego de Dominó para referir una derrota contundente y absoluta de los contrarios, la idea del "zapato democratizador" viene bien en estos momentos cuando buena parte de la población mexicana no se siente justamente representada por sus políticos. Cuando los mexicanos estamos cantando amenazadoramente aquello de "la chancla que yo tiro...". Pero está visto que en el país de los chancludos el rey, además de tuerto, usa zancos de media zuela.
Aquí y allá el electorado mexicano ha decidido ponerse coturnos y corear al unísono, acallando las voces discordantes de los que, esperando sorprender con sus desesperados argumentos, ya afirman en una larga lista que el voto nulo (que confunden con el blanco) es una jalada (dicho sin albur), un parásito, un sufragio tirado a la basura, abstención activa, la razón que ahogará las alternativas minoritarias, una moda, un movimiento de orígenes turbios e intereses creados, una amenaza a la democracia, una manera de sancionar, o simplemente algo inútil, cuando en realidad no es nada de eso. Si es inútil, lo es sólo y sólo si en la medida de las limitaciones que el código de procedimientos establece, porque a ojos de la ley no lo es.
Lo importante es votar, asistir a la casilla y decir "aquí estoy y esto elijo". Que un candidato firme ante notario, como propuso el empresario Alejandro Martí para forzar un compromiso de compra-venta de sufragio, no obliga al político a nada, aunque se constituya alrededor suyo un "observatorio ciudadano". Con todo lo respetable que es la propuesta del señor Martí, no deja de ser ingenua, pasto para populistas y oportunistas, y trasnochada. No olvidemos que el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto ya usó y fue el primero en usar ese recurso, si bien el sentido y el trasfondo fueron distintos. La propuesta tiene buena intención, eso ni dudarlo, pero es perfectible.
La democracia no la hacen los partidos, dicho sea entre Paréntesis, como tampoco la hacen los institutos electorales, ni los medios de comunicación o los políticos. La democracia la hace la sociedad, usted, yo, todos, independientemente de inclinaciones, afectos o fobias. Así, más nos vale un trapazo a tiempo y no un choclo agujerado a destiempo.
Don Jacobo, independientemente de mi admiración por él, es de los pocos que tienen claro el significado y el valor legal, moral y humano de las opciones de voto denominadas VOTO NULO y VOTO BLANCO. Acaso le ha faltado precisar algunos detalles para orientar mejor a su vasta audiencia. Para ayudarle, Indicios Magazín-e le ha hecho llegar una colaboración mínima extraída de nuestra sección Tiempo y Destiempo que también invitamos a nuestros lectores a revisar detenidamente con la idea de aprender a votar de manera efectiva.
Al margen de estas notas y para ampliar un poco el Paréntesis valga decir que se avizora en el futuro cercano un SEÑOR ZAPATO que calzará a la democracia mexicana y hará que la zapatilla de La Cenicienta se vea más que deslustrada en los pies de los partidos y candidatos actuales.
Más allá de su uso conceptual en el juego de Dominó para referir una derrota contundente y absoluta de los contrarios, la idea del "zapato democratizador" viene bien en estos momentos cuando buena parte de la población mexicana no se siente justamente representada por sus políticos. Cuando los mexicanos estamos cantando amenazadoramente aquello de "la chancla que yo tiro...". Pero está visto que en el país de los chancludos el rey, además de tuerto, usa zancos de media zuela.
Aquí y allá el electorado mexicano ha decidido ponerse coturnos y corear al unísono, acallando las voces discordantes de los que, esperando sorprender con sus desesperados argumentos, ya afirman en una larga lista que el voto nulo (que confunden con el blanco) es una jalada (dicho sin albur), un parásito, un sufragio tirado a la basura, abstención activa, la razón que ahogará las alternativas minoritarias, una moda, un movimiento de orígenes turbios e intereses creados, una amenaza a la democracia, una manera de sancionar, o simplemente algo inútil, cuando en realidad no es nada de eso. Si es inútil, lo es sólo y sólo si en la medida de las limitaciones que el código de procedimientos establece, porque a ojos de la ley no lo es.
Lo importante es votar, asistir a la casilla y decir "aquí estoy y esto elijo". Que un candidato firme ante notario, como propuso el empresario Alejandro Martí para forzar un compromiso de compra-venta de sufragio, no obliga al político a nada, aunque se constituya alrededor suyo un "observatorio ciudadano". Con todo lo respetable que es la propuesta del señor Martí, no deja de ser ingenua, pasto para populistas y oportunistas, y trasnochada. No olvidemos que el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto ya usó y fue el primero en usar ese recurso, si bien el sentido y el trasfondo fueron distintos. La propuesta tiene buena intención, eso ni dudarlo, pero es perfectible.
La democracia no la hacen los partidos, dicho sea entre Paréntesis, como tampoco la hacen los institutos electorales, ni los medios de comunicación o los políticos. La democracia la hace la sociedad, usted, yo, todos, independientemente de inclinaciones, afectos o fobias. Así, más nos vale un trapazo a tiempo y no un choclo agujerado a destiempo.
Истинная природа человека, как истинная природа любого другого животного, состоит в целостности. Только посредством интегрированной спонтанности и произвольности (deliberateness) человек может сделать осмысленный экзистенциальный выбор. Ибо как спонтанность, так и произвольность коренятся в природе человека. Сознавание ответственности за целостное поле, за себя и за другого, придает жизни индивида значение и форму.
ResponderBorrarСпасибо, "Anonymous" поучительным для всех комментариях вы оставили в некоторых текстах, опубликованных в этом блоге. Это хорошо, чтобы знать, что мы читаем в местах так далеко, как Россия.
ResponderBorrar(Gracias, "Anónimo", por todos los comentarios edificantes que has dejado en varios de los textos publicados en este blog. Es bueno saber que somos leídos en lugares tan lejanos como Rusia.)