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"El Chapo" en las opiniones de dos "enterados"

DESDE LA REAPREHENSIÓN del narcotraficante "El Chapo" Guzmán, las opiniones no se han hecho esperar, así en contra como a favor del hecho. Asimismo no han faltado las revelaciones o refritos que buscan atizar el fuego o, mejor dicho, mantener el interés en un reality show de talla internacional y cuyos protagonistas y antagonistas gozan de una tremenda popularidad ¿por virtud de los medios?

Los artículos y ensayos de diversa índole, así los que analizan el tema, sus causas y efectos, como los que buscan no mamarle las chichis a las serpientes, abonan queriendo o no (este texto mío y los que vengan acerca del tópico son y serán sin duda una muestra adicional) al espectáculo. Y es que en esta era de opinioncracia (concepto acuñado por un servidor) y memecracia (concepto acuñado por la periodista española Delia Rodríguez), cuando la "opinionitis" y el "opinionismo" de los "opinionistas" (como comenzó a llamarse hacia 2008 a los que, periodistas o no, emitían su opinión mediante los blogs y vlogs) empieza a instalarse en el consciente colectivo y la tendencia informativa, casi no hay nada qué hacer fuera de quedarse al margen o sumarse a la corriente.

El qué dirán de hoy no sucede nada más en el vecindario físico, sino se canaliza mediante las redes sociales. El chismógrafo de la época es Twitter, y la ocasión para el intercambio de la charla de café se ha trasladado a los muros de Facebook. Al primero acuden los apresurados, en el segundo se dan cita los que tienen menos premura para otear el panorama.

Así, alrededor del caso del citado narcotraficante de talla internacional, todos han tenido algo que opinar, lo mismo los mandatarios de naciones que los bromistas. Las fuentes generalmente anónimas de los memes circulantes que sintetizan los paradigmas y las paradojas sobre determinado asunto, en este se han cebado lo mismo sobre tirios que sobre troyanos, ridiculizando tanto a unos como a otros. Como en un buen melodrama, la separación entre el bien y el mal, como derivación de la más reciente propuesta cinematográfica de la serie Star Wars, se establece como parteaguas de lo humano y lo inhumano, de lo audaz y lo estúpido, de lo aceptable y lo reprobable en el ejercicio del poder, cualquier poder.

"No tengo de qué disculparme[...] Jamás me he arrepentido de algo que hago", así respondió la actriz mexicana Kate del Castillo al periodista César Muñoz en una entrevista que, ahora sabemos, concedió a pocos días del encuentro con "El Chapo" Guzmán en el que opinó sobre su carta abierta al narcotraficante y la fuga del mismo. "El problema no es 'El Chapo'", considera la actriz al referirse a los problemas que aquejan a México, acusando como causantes a "todos los gobernantes" cuya corrupción ha llevado al país a la situación actual, exculpando de forma expresa al narcotraficante respecto de la situación política, social y económica del país: "Lo de menos es 'El Chapo'". Aquí la entrevista citada.


Por su parte "prefiere ‪'El Chapo' Guzmán‬ una tumba en México que un calabozo en EUA", opina el conocido ex-sicario de Pablo Escobar Gaviria "El Popeye" quien ha incluido en su canal de YouTube un reportaje sobre la captura y la entrevista del capo mexicano. Lo más interesante es a partir del minuto 8:52 donde él opina brevemente sobre el tema, comparando el final del narcotraficante colombiano con el que puede estar esperando "El Chapo" Guzmán de quien piensa que está haciéndose matar y que enloquecerá en la prisión de alta seguridad. Considera también que los hechos actuales ponen la luz sobre la duda de quién ha sido más poderoso entre Escobar y Guzmán. Enseguida el citado video.


Contrastadas las visiones del mundo que pueden tener unos y otros, solo resta pedir al universo que "la fuerza" nos acompañe, para bien o mal, casi como parafraseando al mismo narcotraficante que, en un tramo de las conversaciones sostenidas mediante celular con la actriz y publicadas por el diario Milenio se muestra agradecido por lo que la famosa tenía planeado hacer por él y su afán por publicar su biografía. Lo que ahora me hace pensar si no será este escándalo el último legado del narcotraficante más buscado, y su epitafio tal vez dirá: "No buscaba pleito, solo se defendía".

La fuerza de un puñado

Pinta tu aldea y pintarás el mundo
Tolstoi

ERA DE LA OPINIÓN… de que ―y discúlpenme las cacofonías en este párrafo― los temas en común podían motivar a la acción y no nada más a la pasión; que la Unión hace la fuerza, pero tal parece que en el casino de la vida y en las maquinitas de la política mexicana la apuesta por la desintegración, la anomia, la inopia y la desmemoria va a la alza y justifica y fortalece la indiferencia social de esos pocos con alguna clase de poder, causando descrédito y menoscabo entre la gente misma. ¡Y luego nos preguntamos por qué nuestros políticos, los empresarios voraces y nuestros gobiernos oportunistas abusan de nuestra confianza!

Cuando la unión lleva al ninguneo
Recientemente, el sábado 18 de julio acudí ―y no es la primera vez― a atestiguar la “nutrida” concurrencia que asistió a una manifestación convocada por vecinos de Naucalpan de Juárez en la plancha de Las Torres de Satélite y de nuevo para protestar, solicitar, exigir a los gobiernos municipal y estatal el mejoramiento de la seguridad en el municipio.

Como otras veces, a la cita organizada llegaron los vecinos sumando la grandiosa cantidad de alrededor de 80 personas provenientes de varias colonias y fraccionamientos sobre todo residenciales de la zona, portando cartulinas y carteles alusivos al tema central, así como un gigantesco crespón con el que enlutaron el monumento.

Entre los participantes se encontraban algunos líderes vecinales, autoridades auxiliares de Participación Ciudadana, asociaciones de colonos, uno que otro medio de comunicación locales y por supuesto las policías municipal y estatal en sus funciones de vigilancia y mantenimiento del orden.
Como muchos municipios del país, Naucalpan de Juárez ha crecido tan desordenadamente que incluso no hay sitios adecuados, desde el punto de vista mediático, para reuniones con este carácter, aun cuando por su “multitudinaria asistencia” aparenten más corrillos o pic-nic que mítines con ambiciones superiores y por ello mismo den pauta a las autoridades para socarronamente tachar a los vociferantes de ser “minorías” sin importancia, pasando por alto que esas minorías, para bien o mal, como punta de lanza bien afilada representan de manera auténtica y legítima a extensas mayorías, incluso de modo más puntual y contundente que los mismos representantes populares que se supone son los legisladores.

Solo algunos puntos en la geografía urbana de Naucalpan de Juárez se prestan para “hacer ruido” y, con todo el riesgo que implica atravesar el periférico y el Viaducto Bicentenario, los vecinos siguen eligiendo lugares como las emblemáticas Torres de Satélite para manifestarse y que sus demandas tengan visibilidad por aire y tierra.

Cruzar la vialidad en sí ya es una forma de llamar la atención, pero la prisa de los automovilistas reduce el tiempo de esta y por lo tanto merma la posibilidad de un impacto memorable en la sociedad.

No faltan los que proponen cerrar el Periférico no nada más para trazar un puente de cruce ―¡imagina, lector, una larga fila de pobladores atravesando de oriente a poniente el Periférico, mejor que caminarlo de sur a norte, digamos, justo en ese punto de Las Torres!―, sino para sustituir los ruidos de los motores con las voces de la ciudadanía como han hecho otros grupos por ejemplo en los paros carreteros, pero eso, que yo recuerde, solo ha sucedido dos veces entre 2010 y la fecha, la primera de ellas cuando vecinos de La Florida contuvieron las obras de construcción del Viaducto Bicentenario. A veces, ser respetuosos de los derechos de terceros solo conduce al ninguneo por parte de esos mismos terceros, conciudadanos o gobernantes.


No basta, me va quedando claro, que el afán de unos pocos ciudadanos conscientes, comprometidos, por mucha influencia que puedan tener sobre sus grupos y comunidades no siempre permea a los individuos que las conforman. La gente siempre es la gente y nunca cambiará, reza la canción, y de ahí que todo siga más o menos igual ―me refiero a la de Sergio Esquivel, que cantara Víctor Iturbe “El Pirulí” en el OTI de 1978, no a “La Vida sigue igual” interpretada por Julio Iglesias ni al tema del grupo argentino de rock Viejas Locas.







Protestando, que es gerundio
Los mexicanos tenemos una larga historia dedicada a construir una imagen de quejosos o, para ser más certero, de quejumbrosos. Chillamos, pataleamos, vociferamos hasta porque voló la mosca, pero cuando se convoca a jalar parejo, a clamar y reclamar en conjunto, ya a éste o ese otro, a Chucha o a Juan se les atraviesa algún compromiso siempre “previamente definido” aun cuando no pase de un mero pretexto. Claro, hay razones de peso, respetables y quizá de último momento que pueden detener al mejor intencionado, eso no lo pongo en duda, no obstante cuando de entre los convocantes alguno o algunos, como se dice coloquialmente, echan la piedra y esconden la mano, eso ya es otra cosa.

A lo anterior súmese la inclinación ya muy característica en nuestra identidad de conmovernos y aplaudir frente a los que aparentan debilidad sin por ello mostrarnos solidarios de veras o por causa de quienes en rebeldía confrontan y ridiculizan a la figura de autoridad, como el “admirable” Chapo Guzmán, y el asunto se agrava.

Contrastando manifestaciones como la descrita con las abultadas concurrencias convocadas por algunos candidatos en las pasadas elecciones o aquellas gigantescas marchas por la paz de hace unos años, uno no puede dejar de preguntarse qué debe suceder para que el hastío propicie movilizaciones de gran envergadura, voluntarias y no como una suma de acarreados con esperanza de sacar algún provecho particular. Y lo hemos visto. ¿Tienen que desaparecer simbólicos 43 normalistas? ¿Tienen que ser vejadas y asesinadas numerosas mujeres e infantes? ¿Tienen que ser secuestrados más hijos de poetas o empresarios? ¿Qué se necesita ya no para sacudir el miedo sino la apatía sin que protestar derive en ocasión para la chorcha y las relaciones públicas o hasta púbicas?

Entre alertas y chismes
Mientras Enrique Peña Nieto fue gobernador del Estado de México nunca se quisieron “reconocer” los feminicidios como un dato de alarma. Ahora, ¡qué casualidad!, siendo gobernador el rival político Eruviel Ávila, este dato se emite como alerta en vista del acusado alto índice de feminicidios en la entidad donde ocurre el 20% y siendo Ecatepec, de donde fuera presidente municipal el hoy gobernador el que presenta más casos. ¿Quién quiere golpear a quién? La alerta puede traer jiribilla. ¿Pretende restar poder a Eruviel que aspira a la presidencia? ¿O pretende echar sal en la herida del presidente señalado sin pruebas claras de haber golpeado a la primera dama Angélica Rivera y de haber asesinado a su esposa Mónica Pretelini?

Es sabido y el mismo Peña Nieto lo confesó en 2012 a la periodista Katia D’Artigues, estando casado sostuvo un par de relaciones extra maritales, una con la también funcionaria en el gobierno de Arturo Montiel, Maritza Díaz Hernández y luego con su colaboradora de campaña para la gubernatura, Yessica de Lamadrid Téllez, con quienes procreó un par de hijos, el segundo de los cuales falleció de cáncer. Y diversos medios han documentado otras presumibles novias y amantes previas a su segundo matrimonio (cf. "Las mujeres de Peña Nieto"). En tanto figura pública no podía escaparse del chismorreo.

Cierta fuente que conoció a Peña Nieto en una entonces muy conocida casa de citas a la que acudían famosos políticos, alguno incluso ahora en el gabinete presidencial, contó a Indicios Metropolitanos una versión que contrasta con las manejadas en los medios, incluidas las acusaciones del vejado homosexual profesor Agustín Estrada Negrete quien afirmó haber sido amante del copetudo caballero: la aguerrida Mónica Pretelini Sáenz habría reaccionado a la infidelidad del influyente marido enredándose sentimentalmente con cierto ex tenista y empresario veracruzano. Ello derivaría en la muerte de la mujer, ocurrida en enero de 2007 y, cuatro meses después, en el asesinato ¡en Veracruz! de 4 escoltas personales del ya gobernador como comienzo de un conjunto de tramas que narrarían fraudes cuantiosos y relaciones oscuras entre la iniciativa privada, sindicatos y delincuencia organizada de cuello blanco.

Novelas conspiratorias y digresiones aparte, lo anterior se relaciona con lo que vengo apuntando porque la dispersión de los gritos y los señalamientos, aun teniendo el mismo volumen los vuelve simple ruido intrascendente, al menos para quienes en la posibilidad de dar soluciones concretas a los problemas de la sociedad prefieren mirar de soslayo y tachar de grupúsculos o sea menos que nada a esos voceros y vindicadores de las causas del Pueblo.

La poderosa estupidez
Pesa en el aire la idea de la ausencia de líderes. No la creo. Los hay, pero la que he dado en llamar opinioncracia parece imperar con tanto poder que los esfuerzos loables de estos terminan diluidos y dispersos en una comunidad apática que ha preferido refugiarse en la comodidad de las redes sociales, desvirtuando el potencial que estas ofrecen, compartiendo más banalidades en vez de propiciar el cambio y la unidad sociales.

Acusamos que tal o cual hecho o noticia suceden de manera perversa y concertada para distraernos de lo verdaderamente importante, no obstante más pronto que tarde seguimos el juego.

En la bondad esencial, por ejemplo, de los memes sustitutos en cierto modo de los cartones y las pintas ―porque ahora no es necesario ser cartonista famoso ni grafitero para hacerlos―, cualquier ocurrencia cabe.


Nos indigna casi todo, la fuga del Chapo tanto como los tropiezos de Enrique Peña Nieto, y hacemos mofa de uno a través de la burla del otro y en el proceso ensalzamos a uno mientras vilipendiamos al otro, sin percatarnos que en la construcción de los significados y de la opinión pública y en lo que esta aporta para el desarrollo social, todos acabamos escupiendo al cielo y cargando el opaco velo del vituperio en el propio ojo. Es cómodo señalar a quien personifica la autoridad, pero ¿quién nos señala a ti y a mí en nuestra mezquina forma de actuar o ser omisos?

De la vapuleada y disminuida clase media para arriba solo se mira por los intereses creados, es raro que se organice la gente ya no digamos para una manifestación sino para defender los derechos comunes. Aun con un nivel sociocultural determinado, con conocimiento aparente de las causas y los efectos, los afanes de los “notables” se esfuman tan pronto como los exclaman.

Hacia abajo, en los círculos más humildes, hay más idea de comunión, incluso más coraje pero este puede ser tanto que deriva en la bravura y la necedad.

Aun pudiendo haber fastidio compartido por el estado de las cosas, entre ambos niveles sociales, incapaces de conciliar para el bien común salvo en raras y honrosas excepciones, se va escribiendo el drama diario de nuestra historia, una en que la estupidez despliega alegremente todo su poderío y cinismo.

No se lea esto como una apología de los héroes ni de los villanos, de víctimas ni de victimarios, cualesquiera que puedan ser en la telenovela del día a día. Mucha de la culpa de lo que sucede a México es sin duda nuestra, sí, tuya y mía, y no estoy parafraseando al infame Donald Trump aunque no deja de tener razón. Por dejados, por convenencieros egoístas más pendientes de la oportunidad de sacar raja que de hacer justicia más allá de los bueyes del compadre.

¿O será que ya leo mal los indicios de lo que pasa en mi país, en mi localidad y resulta que no es por las multitudes y las mayorías, sino por una runfla, una caterva, una camarilla, una canalla, un puñado de individuos que el país se mueve? Un puñado controla la economía. Una canalla controla la política. El hampa controla las conciencias. ¿Y el resto de los millones de mexicanos qué hacemos aparte de sobrevivir, de soportar, lo que ya es decir mucho dadas las circunstancias?

México se está moviendo, sin duda, pero su movimiento es tan imperceptible en su lentitud ―¡y lo que falta!― que seguimos pensando y actuando como si fuera ayer.

Fotos: Archivo VETA Creativa y Mauricio Rojas

Votar es una forma de expresión. Elecciones de 2015, hito en la democracia mexicana

HOY ESCRIBO PARA REVISAR mis dichos previos, por lo pronto los dados a conocer mediante Facebook. Vayan estos primeros apuntes como introducción de un ensayo bajo este mismo título, que vengo escribiendo desde hace días e incluiré aquí mismo.

El día anterior a los comicios pronostiqué: 
[...] para estas elecciones intermedias [...] una anulación nacional alrededor del 12%, abstencionismo próximo al 60%. Por lo que se refiere a mi municipio de Naucalpan de Juárez, pronostico una anulación alrededor del 8%, abstencionismo próximo al 45%, Edgar Olvera como presidente, diputaciones federales con preferencia priyista, diputaciones locales con preferencia panista, ayuntamientos con preferencia priyista...
Si bien no termina el cómputo distrital, al día siguiente a los comicios cuando escribo esto, los resultados preliminares me permiten afirmar, revisar y contrastar lo siguiente en consonancia también con lo que expuse en en textos y vídeos previos y siguiendo planteamientos propios y del académico José Antonio Crespo.

Votos nulo, blanco y la elección nacional. Dispersión del voto
Para el caso de la elección e Diputados Federales, la anulación se perfila esta vez alrededor del 5%; esto si consideramos que, dado nuestro sistema político y la legislación respectiva, marginalmente "cuenta" como una forma de anular la opción por partidos y candidatos no registrados.

Elecciones 2015: Diputados federales
Fuente: PREP INE

Podría pensarse que la anulación, comparativamente con elecciones pasadas en que ha sido de alrededor del 6%, en cierta manera se conserva cuando no se reduce ligeramente. Podría pensarse, por lo mismo también, que la contraparte del movimiento anulacionista, #NoTeAnules, cuyo video del académico Roberto Duque Roquero se difundió viralmente en las redes sociales, caló en la conciencia del electorado propiciando menor anulación, pero esto en verdad no es así aunque en parte, pues lo que sí propició en cierto modo fue el voto conformista y acentuó el "voto de castigo", es decir la idea de votar por votar en el afán iluso, teórico, de que una participación masiva conllevaría un cambio radical, y ese votar por votar supusiera el desvío del voto a modo de castigo, hacia los candidatos o partidos "menos peores", por un lado; y, por otro, la redistribución de la carga de simpatías.

Esto lo vemos en los datos relacionados con el comportamiento de la llamada izquierda que "premió" a un partido reciente como MORENA, mientras "castigó" primero al PRD dejándolo en calidad de la tercera fuerza pero bastante disminuída y vapuleada, segundo, y gravemente al PT que está en riesgo de perder su registro por obtener menos del 3% requerido, lo que no obsta para que sus dirigentes puedan volver a solicitar el registro. Mientras, tercer punto y en contraste, los números de otro partido nuevo como Encuentro Social consiguieron el favor de la ciudadanía, conservando su registro, apenas rebasando el límite. Otros partidos más o menos nuevos como Movimiento Social, Partido Humanista, Partido Frente Democrático, y sin olvidar a la novedad histórica de los candidatos independientes, aun cuando, salvo excepciones muy localizadas, no mantendrán su registro sirvieron para esa distracción del voto de modo que, haciendo un análisis proporcional estadístico, la reacción ciudadana asociada al conjunto de mensajes que implica el Anulacionismo supondría entre el 15% y el 20% de la votación total emitida, lo que hace al creciente mensaje anulacionista mucho más claro y contundente:

  • Tanto voto nulo como voto blanco deben ser definidos en sus alcances democráticos y legales, así como sus efectos sobre el sistema político completo, con la finalidad de que no se preste a más confusión mediante la emisión de sufragios que, en su aparente conformismo redistribuyen las simpatías y antipatías en el interés de servir de indicios del descontento. Es decir, el voto nulo debe contar y no tener nada más un valor estadístico discriminable y remanente. Debe significar. Hacer esto conlleva a mirar las elecciones como un protocolo cerrado y cuyos datos tengan carácter absoluto mejor que relativo, y abrir la puerta, por lo mismo, a la posibilidad de la segunda vuelta en la que participarían los puntales de la primera vuelta y no más. Esto, más la eliminación de las perversiones coalicionistas, permitiría ir definiendo y afinando la oferta partidaria que de veras implica una representatividad ajustada a la realidad de los ciudadanos, más comprometida y responsable con estos.
  • El voto blanco, por su parte, ha de considerarse realmente como una opción facultada para proveer la oportunidad a aquellos ciudadanos e instituciones que, sin necesidad de registro, en el ánimo social cuentan o cuenten con la confianza del electorado como para erigirlos en contrapeso democrático. O sea, se requiere legislar y reglamentar, así como para lo anterior, para que el voto blanco también no sea una casilla "de control" estadístico, sino que implique la posibilidad de una orientación específica del mensaje ciudadano respecto de su voluntad. El voto blanco implica un mandato más directo y libre, menos ajustado a normas y convenciones, que el voto directo hacia fórmulas registradas o el voto indirecto hacia la perversión democrática de coaliciones. Erradicar esta posibilidad del voto blanco, ningunear su existencia como opción, es tanto como ningunear a los ciudadanos e instituciones para los que o las reglas les impiden alcanzar la categoría de opciones registradas, o la inclinación popular eleva a opciones más confiables que las existentes, o sencillamente aun sin sentirse o saberse representados por la oferta política actual optan por aspirar al voto popular o sugieren lo que consideran una mejor opción en contraste con la provista.
  • Hacer lo anterior, sobre todo para el caso del voto blanco, redundaría en la necesidad de permitir que cualquiera, incluso un "fantasma", aun sin necesidad de registro pueda, en estricto derecho y apego a la Constitución, votar y ser votado. Por supuesto, en el caso de los "fantasmas" tendría que legislarse para que no supusieran una tendencia al anarquismo y la ingobernabilidad, pero sí una llamada de atención considerable para inmediatas y futuras modificaciones y ajustes al sistema político y sus actores.
  • Normar al respecto de estos temas debe profundizar la introducción de conceptos y temas asociados y hacerlos, en la medida de lo posible, vinculantes en relación con las decisiones legislativas por venir. Las figuras de consulta popular, el referendo, el plebiscito, la revocación de mandato van de la mano de estas formas de expresión electorales, porque anular y abstener son otras maneras de elegir y por tanto de decisión y no tienen por qué estar sujetas a la confusión entre asistir, acudir y participar en unos comicios. Anular, abstener son, aunque en el extremo de la gama de posibilidades, dos opciones más que forman parte de la oferta natural a que tiene derecho todo ciudadano, toda persona humana, física o moral.
Votos nulo, blanco y una elección local
Me concentro ahora en la elección que me atañe en tanto oriundo de Naucalpan de Juárez, municipio del Estado de México y considerado como "la joya de la corona" nacional.

Revisando mis pronósticos, la anulación para los dos distritos que conforman el municipio (21 y 22) suma más del 11%, lo que excede mi apreciación y sin embargo la confirma en el sentido de que ya consideraba yo que se produciría un incremento del 5% histórico al 8%. En estos datos no estoy tomando en cuenta, como en el apartado anterior, los conceptos de votos blancos y votos de castigo. Desde esta perspectiva puede pensarse conforme a los datos registrados que el voto nulo se redujo pero, si se toman en cuenta esas otras manifestaciones electorales, los resultados de nuevo implican un mensaje más claro y contundente de protesta y reclamo de la ciudadanía, pues simplemente en el Distrito 22 del Estado de México, a modo de reducido ejemplo, la proporcionalidad en la distribución del voto en este sentido rebasa el 15%.

En este caso, como en el anterior, lo determinante para la comprensión del fenómeno está en los datos de la varianza y de la covarianza. Esta segunda es la que nos da la clave para, respecto de los históricos, poder enfilar la normatividad hacia la definición de los conceptos que hacen del voto una forma de expresión y por tanto un acto comunicativo con un peso específico y susceptible a presentar varias manifestaciones y efectos. El mensaje está siendo, pues, cada vez más claro: la clase política debe reaccionar, abrirse, dedicarse a lo que le compete. La exigencia ciudadana es general: el estado que guardan las cosas, nuestra democracia, debe cambiar ya; el voto es un derecho y no una obligación.

Votaciones locales
En lo relativo a las elecciones de diputados locales, presidencias municipales y ayuntamientos (síndicos y regidores de cabildos) ¡atiné!, por virtud de la observación sistemática de los hechos y los antecedentes, al triunfo de Edgar Olvera del PAN sobre David Parra Sánchez del PRI, aspirantes a la presidencia de Naucalpan de Juárez. Las implicaciones y trasfondos de esto los analizaré en otro momento y de forma concreta.

En lo tocante a las diputaciones federales, aun cuando lo sospechaba, me equivoqué al considerar la preferencia razonada del electorado por el PRI, en el supuesto de que un presidente municipal panista tendría que ser contrarrestado con sus opositores. En cambio, el triunfo de Angélica Moya (ex presidenta municipal de Naucalpan de Juárez) sobre Enrique Francesco Jacob García, puede leerse como el triunfo más bien sobre el estatus quo y una reacción de repulsa respecto de las dinastías políticas. El gran castigado localmente fue el PRI, si bien sabemos que el reparto del pastel colocará en su curul a todos o casi todos los competidores, a querer o no por parte del electorado, como es el caso del ex presidente municipal David Sánchez Guevara que, no obstante el triunfo panista gozará de su diputación federal y por lo tanto de fuero que, aun siendo un derecho de noble origen y principios, su abuso ha derivado en su execración por parte de sus detractores. El fuero debe seguir existiendo, sí, pero es necesario normar al respecto de las perversas tentaciones a que orilla.

Me equivoqué también en lo referente a las elecciones locales, en el sentido contrario, pues mientras suponía un voto razonado que en el congreso estatal contrarrestara con mayor presencia panista al gobernador Eruviel Ávila, su poder más bien se vio reforzado, lo que de alguna manera enfatiza la división que ya he anotado entre lo que podemos llamar "Grupo Ecatepec" frente al "Grupo Atlacomulco" y va ya definiendo algunas tendencias con miras a la conformación de la fórmula priyista hacia las elecciones presidenciales de 2018, poniendo cierto freno a las intenciones del presidente Enrique Peña Nieto de enfilar a su primo Alfredo del Mazo Maza como alfil para recobrar la gubernatura del Estado de México y sentando las bases hacia una nueva alternancia en el poder, respecto de la cual pronostico ya desde ahora la llegada de la izquierda al poder presidencial, siendo muy probablemente el favorecido el PRD, siempre y cuando consiga recomponerse tras la escisión larga y dolorosa que ya yo había augurado analíticamente tiempo atrás como consta en mis textos al respecto (Escisión a la vista 1, 2 y 3). Esta condición es fundamental pues, de no cumplirse, el favorecido con la oportunidad sería el partido MORENA y por lo tanto Andrés Manuel López Obrador que antes y durante las campañas recientes expuso abiertamente su interés de volvera a lanzarse a contender por el cargo, cometiendo el delito electoral de hacer campaña anticipada para entonces, pero que dudo resulte penalizado de algún modo llegado el momento. No en balde ya decía yo tiempo atrás:
La designación de Eruviel Ávila tiene como principal motivación atraer un sector geográfico y social del Estado de México que estaba en riesgo de ser perdido electoralmente tras los coqueteos que había venido haciendo desde años atrás la corriente MORENA de Andrés Manuel López Obrador, no tanto para llevar agua al molino del PRD como al propio.
Personalmente considero que MORENA (cuya fundación como partido también auguré aquí) sí podría aspirar a la presidencia en 2018, siempre y cuando consiga la izquierda recalcitrante que representa zafarse del fardo en que se han convertido Andrés Manuel López Obrador en tanto político y las tendencias rijosas de corporaciones como la CNTE y similares, aun cuando justo son las que le dan su toque de color extremista que hace de MORENA una plataforma atractiva para los amargados, los rebeldes a ultranza, los mesiánicos, los opuestos al establishment, los troles y otra fauna política y comunicativa que ha encontrado en las redes sociales la mejor extensión de la anarquía opinioncrática (véase mi texto "Cuando la opinioncracia nos alcanzó" y posteriores).

Lo mejor que puede hacer AMLO, en tanto líder moral y fundador (como también auguré en otro texto aquí) del partido que se estrena con muy buenas expectativas en estas elecciones, es quedarse así, en esa calidad, y hacerla valer como el único ideólogo a la vista en el vasto panorama de la política mexicana. Porque ya no hay ideólogos. Muerto Reyes Heroles (PRI), muerto Castillo Peraza (PAN), alejado de su creación Cuauhtémoc Cárdenas y muerto Heberto Castillo y coqueteando con el poder Fernando Belaunzarán (los tres del PRD), hay ausencia de ideólogos y visionarios. Ese sí es el principal valor de AMLO por encima de su tozudez.

Los dos panoramas revisados para mi municipio, los vi especularmente al revés y lo único que puedo pretextar es la confusión implícita en el electorado dubitativo y enfrentado al falso dilema "votar o no votar", que trazó una especie de neblina cognoscitiva que hacía difícil distinguir al elector indeciso del revanchista.


Elecciones 2015: Diputados federales, Distrito 22.
Fuente: PREP INE

Elecciones 2015: Diputados locales Estado de México
Fuente PREP IEEM

El fantasma del abstencionismo
Los candidatos que tuve ocasión de entrevistar, al cuestionarlos sobre cuál era su enemigo a vencer, invariablemente me respondieron: el abstencionismo. A la luz de los resultados de este 2015, ¿lo fue?

Respecto de este tema, mis previsiones no estuvieron tan descaminadas como también se observa en las imágenes que comparto aquí, aun siendo retratos parciales, pero en las que puede observarse que, en promedio, en efecto la abstención se mantuvo dentro de las cotas "normales" características de las elecciones intermedias, aun cuando acercándose de manera preocupante al 60% respecto del histórico.

Este dato, aunado al tema del voto nulo y blanco confirma y refuerza mi postura y mis dichos en cuanto a que la abstención también ha de ser regulada como una opción más, en tanto forma de expresión y acto comunicativo del elector y, por lo mismo, o se define la participación con carácter obligatorio haciendo del voto una obligación a despecho y contradicción con lo asentado en nuestra Carta Magna (lo que sí podría casi asegurar una participación, si no total, mucho más nutrida por virtud de la coacción) o finalmente y en consonancia con esta se le asienta en toda su dimensión axiológica en tanto derecho universal y humano, consolidando así su peso semántico y encausando la manera de interpretar su aumento o disminución.

Es necesario dar al ciudadano y al sistema político certeza sobre los mensajes que pueden significar estas opciones electorales del voto nulo, blanco y el mismo acto de la abstención, para que dejen de ser datos vagos y discriminables, y mejor cobren carta de naturalización.

El ciudadano necesita tener claro y dejar claro qué quiere decir cuando no asiste a la casilla electoral por voluntad propia por contraste con las veces cuando se ve forzado por distintas circunstancias a no hacerlo. Y tan lo necesita que basta ser funcionario de casilla, como he sido, para atestiguar las leyendas, diatribas, consideraciones, apuntes y señalamientos, incluso los mensajes añadidos, encartados, filtrados en la urna electoral por medio de las boletas.

El mexicano necesita tener claro y dejar claro mediante la boleta electoral —en tanto medio de comunicación— y de la urna —en tanto canal comunicativo— qué quiere significar con sus variados mensajes, algunos con carácter de protesta, otros de llamamiento a una revolución pacífica e íntima a efectuarse desde las instituciones.

Ha llegado pues el momento de no nada más construir, sino sobre todo de orientar, definir y dirigir el modelo de país que queremos. La partidocracia ha implotado. Quizá con estas elecciones, hito en la democracia mexicana, estamos fincando la piedra miliar del futuro parlamentarismo socialdemócrata mexicano.

Diputado "Topete"

ERA DE LA OPINIÓN... de que todos podemos tener nuestros cinco a quince minutos de fama, pero la modernidad ya nos los ha reducido para hacerlos más "deliciosamente" frecuentes, así que todos hoy podemos gozar de 15 segundos de fama o infamia.

También Era de la opinión... de que los conflictos entre las personas se resuelven mejor con el diálogo preferentemente que con la violencia. Pero hay no nada más ciudadanos, sino representantes populares, legisladores, funcionarios públicos que, en esto de la opinioncracia, no son del mismo parecer y, sea porque tienen mecha corta, porque están demasiado sujetos a una ideología machista por la que la razón se impone a la persuasión, consideran que más vale para convencer y conseguir sus metas un puñetazo o un cabezazo a tiempo. O será que simplemente se pasan de "cabroncitos" ansiosos por poner a prueba sus pezuñas y cornamentas.

Recientemente un joven diputado con licencia y candidato a diputado de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Fernando Zárate demostró justamente esto: a los berreos ha de seguir el cabezazo para hacer que valga el dominio, el estatus. No basta con el charolazo o la cacallaca petulante, hay que ser "contundente" en la argumentación del abuso del poder.

Tras el hecho, el imberbe legislador se justificó en su cuenta de Twitter alegando estar molesto porque cierto funcionario público despojó a una mujer de su casa tras presumiblemente asediarla; y que sólo asistió al lugar a auxiliar a los vecinos de la colonia Tierra Nueva en la Delegación Álvaro Obregón.


Si bien es de concederse que el video en el que fue captado el suceso y que circula ya en las redes sociales es solo un vistazo al hecho y se presta para justificar la descontextualización del mismo, no obstante la conducta registrada del legislador no es menos reprobable y se equipara en todo caso con uno de tantos reportes de violencia callejera, tan común como grave por el dolo, la alevosía y ventaja tras el acto. Es una pena que las leyes del país pongan a los ciudadanos y funcionarios de todo orden en la indefensión frente a actitudes semejantes. Es un indicio de que el fuero debe ser erradicado o por lo menos reglamentado y de que en las casas de cada quién, sea que se gesten o no futuros funcionarios públicos, algo está, no faltando, sino sobrando en la educación.

Bear Grylls. Ni muerto ni de parranda

LA INFORMACIÓN A VECES PUEDE PARECER FALSA por causa de uso de metáforas de quienes la difunden. A veces solamente por la ociosidad o la mala leche de quienes generan la información. Es el caso de la nota que circula hoy alrededor de la supuesta "muerte" del presentador británico Bear Grylls que más bien queda en calidad de "muerto viviente" que se regodea impregnado de lodo en la pantalla chica.

Ni en la página oficial del presentador ni en sus cuentas oficiales de Twitter, Facebook y YouTube se ha confirmado que haya muerto.

La verdad es que el personaje no ha muerto, sino solo ocurre que lo hizo metafóricamente desde el momento que el canal estadounidense Discovery Channel puso fin a su vinculación con el presentador del programa de supervivencia "Man vs. Wild" por disputas contractuales. Así lo informó The Hollywood Reporter hace tres años (fuente: Taringa). Posteriormente el mismo canal produjo otros programas con el presentador como se asienta en la página oficial del personaje. Está pronto a salir al aire un nuevo programa intitulado "Island of Lost Blocks".

Esta noticia falsa, una de tantas que circulan en la Internet, surgió en julio de 2014 creada al parecer por un vloguer mexicano de YouTube que responde al apodo o nickname "FanTasmaN XandeR" con la finalidad de, mediante humor negro a costillas del presentador, elaborar una editorial con la cual emitir una protesta por las condiciones de inseguridad que se viven en México; coincidiendo más o menos con las fechas cuando se dió a conocer la noticia de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos en el estado de Guerrero.

Al presentador británico ya lo han "matado" metafóricamente al menos dos veces. La segunda en Colombia. Con lo que se ha convertido en una especie de emblema de la supervivencia en condiciones arduas como las que algunas personas consideran que viven en sus países. La moraleja crítica que pretenden difundir es algo así como: si un experto en sobrevivencia no pudo salir avante con las pruebas a que el país somete a sus ciudadanos, qué pueden esperar estos en el futuro cercano. Pero tiene, como toda nota de humor negro una segunda lectura: el país sobre el cual se quejan sus ciudadanos no es apto para extranjeros, por muy expertos en sobrevivencia que sean; solo los oriundos cuentan con el "sistema inmunológico" para contrarrestar la corrupción sociopolítica.

La noticia ya ha sido desmentida varias veces, nunca por el presentador mismo, sino por blogueros y periodistas más enfocados en la verdad (como es en cierto modo mi caso), y pone en evidencia la cantidad gigantesca de internautas trasnochados para los que cualquier noticia, así sea de hace un lustro, por verla en la red como novedad y sin verificar su fecha de creación o difusión (dato que no todos los medios anotan, hay que decirlo, a propósito o por estupidez) la creen a pie juntillas como si fuera un hecho del día cuando solamente se trata de un chisme, rumor o broma.

Por lo tanto este tipo de notas conlleva varias lecciones prácticas para los internautas en general, así los creadores de contenidos como los que solo los usufructan en calidad de espectadores, a saber:

  • Descree la información, no te quedes con la primera fuente que te informa. En la red hay mucho bodrio y abundan las ocurrencias creadas o por ociosos o por mal intencionados.
  • ¡Conéctate más seguido! De qué sirve que disfrutes de los beneficios de la tecnología, si no estás al día. ¿Eres de los que revisan su correo una vez a la semana o al mes? ¿Eres de los que navega por entretención y sin detenerte a pensar sobre la antigüedad de lo que encuentras? Si tu respuesta es positiva, entonces no te extrañe que te tomen el pelo a cada rato.
  • Por muy de vanguardia que presuman ser tus amigos y los tengas como "líderes de opinión" dentro de tu círculo, muchas de las cosas que comparten o publican pueden ser contenidos de dudosa procedencia, discutibles, reciclados, caducos, o de veradadera inutilidad para la formación de una opinión pública enterada. ¡No caigas en los excesos de lo que he dado en llamar la opinioncracia!
  • Aprende a leer entre líneas. Así como con los textos escritos, como este, es necesario practicar una lectura de comprensión afinada, igual sucede con otras formas de comunicación. Una imagen como una obra de arte, por decir más que mil palabras, por tratarse de una "obra abierta" y al contrario de lo que se cree, no es más fácil sino más compleja de interpretar; y si la obra tiene movimiento aún más. Nunca te quedes con la primera impresión, analiza, adéntrate en la obra, sus antecedentes y ligas con obras semejantes o no a la que captura tu interés en el momento. Descubrirás que hay conexiones sorprendentes en la forma como los seres humanos nos hacemos conocer lo que compone nuestro mundo.
  • Si vas a crear un contenido, ten presente no nada más tu objetivo de comunicación, sino las consecuencias de tu acto comunicativo. Piensa que puedes ser la fuente misma del desorden y la confusión cuando tu interés puede ser exactamente el opuesto.






¡Mírame, pero no me toques!

ERA DE LA OPINIÓN... que lo visto en los medios audiovisuales solo suponía un fragmento de la realidad. Desafortunadamente quien publica un vídeo donde se ve al 2° Regidor de Naucalpan de Juárez por el PRI, Martin Hernández Castro,​ exaltado no aclara los detalles antecedentes. Sin esos datos uno no puede tomar partido por nadie así se trate de la "Lady de Polanco" o tantos otros casos que de un par de años hacia acá se han suscitado. Hacerlo resultaría y resulta no solo injusto sino estúpido.


No puede juzgarse a nadie por su solo comportamiento, sin sustentar lo que puede explicar dicha conducta. Sin conocer de manera amplia la versión de la contraparte.

A veces, y a mí me ha pasado, me colma el plato alguien o una injusticia y reacciono de manera "violenta" (tengo la voz muy fuerte, entrenada además por el teatro y la locución), pudiendo dar una imagen por la que, cualquiera que pasara por allí o viera de manera descontextualizada en un vídeo similar, seguro me tildaría de "gentleman de La Florida"... Ni tanto que queme al santo, ni tanto que no le alumbre.

Ese es uno de los grandes peligros de las redes sociales, cualquiera puede subir un vídeo hecho espontánea, improvisádamente en afán de registrar lo que considera un exceso o una gracejada, cuando a lo mejor no es tal en estricto sentido sino solo por su apreciación personal.

Muchos de los vídeos que circulan en las redes elaborados por personas comunes, no profesionales de los medios, con sus cámaras portátiles y sus celulares, movidos a veces por la simple curiosidad o por un afán justiciero o simple ocurrencia, generalmente muestran información parcial, descontextualizada y por ello mismo desvirtúan los fundamentos que sirven de pretexto a la opinioncracia para montarse en el espectáculo mediático en contra de algún funcionario, alguna autoridad, algún representante popular o cualquier ciudadano captado in fraganti. No se vale.

Lo dicho aquí no va en descargo ni del regidor ni del policía que testimonia (no denuncia) el comportamiento evidente. No nos consta nada en tanto lectores de la imagen, y sin embargo ya circulan diatribas y no tardarán los memes quizá difamatorios.

El vídeo tomado de una peculiar página en Facebook: Policías Unidos de Naucalpan, surgida en 2014 sin motivos muy claros (no ofrece mayor información básica), se suma a las publicaciones ahí donde los policías del municipio de Naucalpan de Juárez exhiben una postura reivindicatoria del oficio y que permita al ciudadano entenderse respecto del procurador del orden social como su valedor. Es, esa página, aparentemente una estrategia de tantas para conseguir reposicionar a la policía en la confianza de la ciudadanía (véase mi artículo anécdótico al respecto).

En fin, estamos en la era de la opinión y cada cual cuenta ahora con las herramientas tecnológicas que lo empoderan y habrá de aferrarse a la suya en el interés de construir el significado de las cosas que le rodean y hacen su mundo, aun cuando ese significado no sea del todo veraz.

¡Políticos, a escena!

LA CANDIDATURA DEL FUTBOLISTA CUAUHTÉMOC BLANCO por el partido Socialdemócrata (PSD) para ocupar en 2015 la alcaldía de Cuernavaca, Morelos, ha causado más revuelo del que nunca en la historia habían ocasionado candidaturas similares en la historia de México.

Esta candidatura ha llevado al extremo de que algunos comunicadores como Chumel Torres, al amparo de la libertad de expresión sobre todo la que se goza en el medio de la Internet cometan, a sabiendas o sin proponérselo, el delito electoral de convocar o inducir a la ciudadanía, en este caso de internautas, a no votar por tal o cual candidato, como consta a partir del minuto 2:12 de El Pulso de la República que conduce Chumel, en su emisión semanal del 26 de enero, donde luego de hacer una descripción y determinadas consideraciones editoriales acerca del tema y la persona remata, diciendo literalmente y señalando con dedo flamígero y retórica dictatorial: “La gente de Cuernavaca no está tan loca como para votar por... ¡No vayan a votar por Cuauhtémoc Blanco, cabrones, eh! ¡No mamen, neta! ¡Neta, neta, eh!... Cuernavaca...”. Y luego, en el minuto 3:31 dice: “¡No vayan a votar por Cuauhtémoc, cabrones, es neta!” para continuar en el minuto 3:41 afirmando: “Desde El Pulso de la República francamente deseamos que esto no suceda, porque si ya con le payasito ‘Lagrimita’ la vida de Guadalajara parece un programa de comedia, Cuernavaca parece el episodio más aburrido de los Supercampeones”.


El caso del ex futbolista no es nuevo ni exclusivo de México.En la historia moderna del mundo —pero México es lo que nos interesa aquí y ahora—, desde los años cincuenta por lo menos, diversas personalidades e intelectuales de la literatura, las artes escénicas, las artes figurativas, la arquitectura y los deportes, vaya, la cultura en general, lo mismo que campesinos y más recientemente miembros de algunas etnias del país, homosexuales, prostitutas han ejercido su constitucional derecho ciudadano para aspirar a un puesto de elección popular, siempre y cuando cumpliendo con los requisitos de ley. Así que en realidad no habría razón para llamarnos a sorpresa.

Poner en duda la honorabilidad de una persona, cualquiera que sea, por su solo oficio además de sus aspiraciones políticas es un signo de intolerancia supina, y sesga en la opinión pública hacia la discriminación grosera y humillante, aun cuando se haga con gracejadas irreverentes como en el caso de Chumel Torres.

Política mexicana, entre el dedazo y el "chapulín colorado"
Es cierto que en la historia del país los puestos políticos han dado pie a lo que en México llamamos “chapulines carroñeros”, es decir aquellos individuos que brincan de un puesto a otro de elección popular haciendo una “carrera” política, así sea efímera, en el afán de no soltar “el hueso” que les da de comer y la oportunidad para, con el poder en la mano, hacer tropelía y media en beneficio egotista y a contrapelo de los intereses de la nación o de la limitada localidad a la que representan o sobre la que gobiernan. Pero también es cierto que no todos los hombres están hechos del mismo barro. Que una persona se exprese o viva de tal o cual modo no la hace mejor que otra; el que tenga tales o cuales habilidades, conocimientos, profesión o vocación no la hace menos ni más apta que a cualquiera, salvo en condiciones muy específicas, para ejercer sus derechos. Insistir en semejantes barbaridades conduce a que, por ejemplo, si el día de mañana una persona con síndrome de Down quisiere aspirar a una diputación para representar a los similares a ella, le negaríamos el paso por el simple prejuicio de sus naturales o supuestas “limitaciones” o discapacidades.

Lo que cuenta, sin duda, al momento de uno lanzarse tras un puesto político o de votar por alguien que aspira a legislar o gobernar nuestros destinos son los propósitos, los que por supuesto cualquiera imaginamos nobles en principio, pero caras vemos, corazones no sabemos e intenciones, menos. La imbecilidad o la estupidez son rasgos que metafóricamente acaban envolviéndonos a todos y no por ello tenemos menos oportunidad de incidir en el desarrollo de una nación, para bien o mal ya seamos administradores públicos, de empresas, abogados, ingenieros, expertos en ciencias políticas.

Manuel Velasco Coello y Anahí.
Foto: Revista Hola
Podemos aquí mencionar algunos nombres de famosos, muchos, que han ocupado curules o puestos políticos, o simplemente incursionado de un modo u otro en la política. Actrices: María Rojo, Silvia Pinal, Helena Rojo, Irma Dorantes, Irma Serrano “La Tigresa”... Actores: David Reynoso, Ignacio López Tarso, Julio Alemán, Erick del Castillo, Héctor Bonilla, sin olvidar, saliéndonos del ámbito mexicano a John Gavin (embajador de EE.UU. durante el gobierno de Ronald Reagan), Arnold Schwarzeneger (gobernador de California)... Escritores: Heráclio Zepeda, Andrés Henestrosa, Agustín Yáñez, Mauricio Magdaleno, Carlos Pellicer, Jaime Torres Bodet, Pablo Neruda, José Martí (y con él ya me fui al siglo XIX donde encontramos a Ignacio Ramíres “El Nigromante”), Octavio Paz, César Augusto Santiago, el poeta Václav Havel (el primer presidente de la República Checa post socialista)... Deportistas: Carlos Mercenario, Carlos Hermosillo, Raúl “Ratón” Macías, Ana Gabriela Guevara, Noé Hernández, Iridia Salazar, Víctor Estrada, Roberto Ruiz Esparza, Fernando Platas...  La lista puede ser exhaustiva y no basta con revisar las listas de militantes de los distintos partidos o la historia del Congreso mexicano y quienes han pasado por él ya como diputados, ya como senadores, en la mayoría de los casos y al menos hasta 1994 bajo el emblema priyísta. En puestos de gobierno aún no se han dado casos a no ser marginalmente, como sucedió con Silvia Pinal mientras fue esposa del gobernador de Hidalgo Tulio Hernández Gómez, Victoria Rufo tras casarse con el también gobernador de Hidalgo Omar Fayad, o los más reciente y más sonados de la primera dama Angélica Rivera “La Dueña” o “La Gaviota” casada con el presidente Enrique Peña Nieto y de la actriz y cantante Anahí comprometida actualmente con el jovencísimo gobernador de Chiapas Manuel Velasco Coello.

Sin entrar en teorías conspiratorias acerca de la mano que mueve la cuna y las relaciones perversas de las televisoras, concretamente Televisa, y el poder político, las reacciones populares a casos como los mencionados no dejan siempre de ser desproporcionadas aun cuando las sustente algo de razón.
No es gratuito que los partidos políticos apelen, desde una perspectiva de mercadotecnia y comunicación política, a la fama de las personas para atraer votantes, afiliados, simpatizantes a su causa, incluso militantes y para afianzar sus particulares objetivos y estrategias políticas. Si lo hacen las empresas particulares, ¿por qué no los institutos políticos o las instituciones gubernamentales o los organismos no gubernamentales y las asociaciones civiles? ¿Acaso hay una norma que lo prohíba fuera de las consideraciones moralinas de ciertos grupos de ciudadanos aquí y allá?

El mercado de la fama
Algunas celebridades se prestan al juego de la imagen aun cuando en el proceso pueden salir raspadas. A diferencia del ciudadano común, los famosos están hechos de una pasta refractaria a la crítica y la maledicencia. Para ser famoso se requiere, sin duda, de un carácter lo suficientemente desfachatado y cínico para soportar la andanada de señalamientos justificados o no en su favor o en su contra.

El temperamento es un elemento adicional que ayuda a modo de parapeto o incluso de ariete al momento de las tácticas políticas de los partidos y de quienes mueven los hilos detrás de ellos, máxime de los partidos pequeños en su afán por obtener el porcentaje básico para mantener su registro y seguir chupando del presupuesto. De ahí que no cualquiera tenga esa “piel de rinoceronte” con el grosor suficiente para tolerar las a veces lacerantes e injustas argumentaciones propias de la opinioncracia que hoy nos dirige.

"La Venus del Espejo" por Diego Velázquez
Esto que digo nos pone frente a frente ante los distorsionadores espejos de la casa de la risa, en ellos el más pintado descubre ampliados y deformados sus rasgos, aunque sean muy nobles. Sea intelectual, artista, abogado, ama de casa, joven estudiante, al momento del ejercicio del derecho democrático para votar y ser votado, y aún más, al momento de acceder al poder que la democracia otorga al elegido por una mayoría, los individuos quedan igualados en sus ambiciones tanto como en sus mezquindades. ¿O qué, es necesario pertenecer a un gremio específico para dedicarse a la política?

La política vuelve más vulnerable a la persona y más si esta queda inscrita como ahora estamos viendo y experimentando en una meritocracia para la que merecer un cargo público debería ser tema exclusivo para iniciados. Por eso, en lo personal, execro la meritocracia.

Cuando escucho y leo acerca de la idea de promover entre nuestros legisladores una “carrera” y poner como condicionante de la misma la idea de la reelección me ataca la carcajada. ¿Acaso nuestra sociedad es tan ingenua como para no darse cuenta que esa carrera, a querer o no ya existe? Nos gusten o no, entre las filas de legisladores y políticos “profesionales” tenemos verdaderos tribunos que han conseguido logros plausibles y claro que tenemos también esquiroles y pamemes y chambones y lamebotas y rémoras... La fauna política es muy extensa y no ha llegado el taxidermista que haga la clasificación correspondiente que permita adentrarnos en las peculiaridades de cada clase, orden, especie, tipo y filum políticos.

Aristóteles lo dejó muy claro en la antigua grecia: el hombre es un ser político. La estupidez es tan humana que ninguno estamos exentos de cometer torpezas ya en la elección de quien puede representarnos, ya como representantes de un grupo concreto, ya como gobernantes. Errar es humano, pervertir es humano, corromper es humano, santificar y bendecir también son acciones humanas. Y hay torpezas que se cometen por maldad y otras en que se incurre por inocencia.

¿Acaso Chumel Torres es mejor que Cuauhtémoc Blanco? ¿Por qué? Si él aspirara a un puesto de elección popular, ¿qué pensaríamos de él, cómo lo calificaríamos? ¿Sería un buen candidato? ¿Para quién? Una cosa es segura, representaría a los irreverentes para empezar; ¿a todos?

Lo que olvidan comunicadores como Chumel y candidatos como Cuahtémoc son el peso y las posibilidades que conllevan el poder de hablar ante un micrófono o desde un templete y una silla de gobierno. Posibilidades que van desde experimentar el escarnio, la antipatía y la reprobación hasta la loa ante el tino en las decisiones tendientes a propiciar el bien común. Esto mismo que ahora escribo me coloca en la palestra, ante los ojos de los lectores críticos que pueden manifestar su acuerdo con mi dicho o discrepar.

De nuevo mi exhorto es a no ser más papistas que el Papa. La máxima revolucionaria de dejar hacer y dejar pasar encierra una gran sabiduría, porque al fin y al cabo las cosas y las personas caen por su propio peso sin necesidad de colocar la testa en la guillotina, y si bien ninguno somos monedita de oro para caerle bien a todo mundo, todos "merecemos" al menos una oportunidad para mostrar lo que somos capaces de hacer en pro de los otros o incluso de nosotros mismos. Como bien dice el juramento que han de hacer los servidores públicos, al final será la nación quien les demande cuentas y la historia la que los ponga en su “justo” sitio. Dejemos que los actos hablen por quienes los cometen y se dicen hombres de bien.

Voracidad montaraz

CON MIRAS AL AÑO ELECTORAL PRÓXIMO en México, la "guerra sucia" ya comenzó desde hace semanas y los "bombazos" (me refiero a los mediáticos, aunque no se pueden olvidar los otros, tanto los que ensordecen con su estruendo como los que enceguecen con su dorado fulgor) no se han hecho esperar tanto desde la trinchera del gobierno, el congreso —con iniciativas que pretenden “regular” el derecho de manifestación— como desde las de los partidos políticos, las organizaciones no gubernamentales y los grupos de oportunistas de toda tendencia y factura.

Casos tan dolorosos e indignantes como #Ayotzinapa han pasado a ser el "arbolito de navidad" preferido de los mezquinos intereses de facciones en pugna por el poder o el dinero, y las víctimas han venido a convertirse en los pastorcillos inocentes y humildes que rodean el pesebre del poder con la esperanza de obtener una luz y un ápice de justicia de algún redentor. Bienaventurados los pobres de espíritu, que de ellos será el reino de los sueños democráticos.

Quitando los adjetivos y los sarcasmos, la participación de los jóvenes, muchos de ellos sí efectivamente estudiantes usados para no variar como carne de cañón aprovechando su entusiasmo, su impulsivo hartazgo y su maravillosa capacidad de ensoñación (muchos ya pasamos por esas edades y algunos seguimos fascinados con lo que palpita en nuestro pechos); la participación de los jóvenes, decía, ha sido fundamental para sentar las bases de una conciencia fresca y renovada frente a los acontecimientos recientes y ya históricos que nos afectan. La insistente búsqueda de fincar descrédito en la opinión pública respecto de tal o cual grupo ha sido la estrategia más acusada en últimas fechas. En realidad siempre ha ocurrido, solo que ahora es más evidente, más difundida, más extendida por virtud de las modernas herramientas tecnológicas.


Evidencias no son pruebas
Ante un pueblo suspicaz, cada vez más incrédulo de lo que pueda decirle cualquiera con cierto tufo a autoridad, sea de gobierno o de academia o vecino, estamos en el filo de la navaja de encontrarnos todos contra todos en la Babel gobernada por la opinioncracia en que ya se perfila México.

Muestra es el botón gráfico que circula en las redes sociales desde el 9 de diciembre y que muestra a manifestantes boteando en casetas carreteras y contando el dinero recaudado. No es la primera vez, ni es el primer grupo o movimiento en hacer cosa semejante. Tal vídeo, que destaca porque señala presuntos delincuentes, al momento de escribir yo estas líneas cuenta con una modesta estadística de casi 18 mil quinientas vistas y, si nos ponemos a especular, pudo tener lugar solo de dos maneras: o en el grupo retratado hay traidores o hay infiltrados, ¿quizá de la inteligencia del CISEN, de la Procuraduría General de la República?

Del modo que los vídeos en donde se ha mostrado a diputados panistas (y no nada más) en francachelas animadas, amartelados con ciertas mujeres de dudosa reputación y cuyos antecedentes de fausta o infausta memoria —según se miren— están en las ligas de Bejarano por ejemplo, estos "hallazgos" o, como decimos en periodismo, "filtraciones" tienen la clara intención de dividir la opinión pública atizando el miedo, el rencor, la desconfianza, abonando el caldo de cultivo donde pueda prender el moho del "liderazgo" capaz de encauzar en vez de encausar las dolencias de la población hacia los propios molinos disfrazados de gigantes protectores. Aunque contradictoria, es una táctica para descontrolar y de ese modo mantener el control sobre las líneas de poder, mando e influencia sociales.

Quitar a cuáles pobres para dar a cuáles ricos
Como si fuera atacada por un raro virus causante del síndrome de Robin Hood y por lo mismo la paranoia lleva hace que a la población le parezca reprobable que la primera dama de la nación o el secretario de hacienda posean propiedades dizque resultantes de sus personales peculios; con razón o sin ella, esa ciudadanía mira o espera lo malo aun donde tal vez no haya maldad o perversión. No obstante, esa misma población no ve siquiera con el mismo recelo el misterio en el trasfondo de financiación que hay detrás de determinados movimientos sociales y no exige cuentas con la misma vehemencia que a las instituciones constituidas.

El boteo o pase de charola es una práctica común en movimientos caracterizados por manifestaciones; es una herencia antigua no exclusiva de los templos, los partidos, sindicatos o logias o vecindades. Y aun cuando no lo justifico, entiendo la razón logística y económica que la sustenta: hay que pagar mantas, pancartas, vitualla y demás pertrechos propios de cualquier activismo (incluso, a veces, a los acarreados o los parachoques que han hecho de su "valiente" oficio toda una oscura "industria" ventajosa para quienes gustan de dar o recibir los catorrazos o ven en tal actividad una fuente alternativa de ingresos). Y es una de tantas maneras de allegarse ingresos para solventar la lucha y la causa que la caracteriza. Así, al margen del conflicto que a veces supone el choque de derechos de tránsito, manifestación, expresión, sea mediante la organización de kermeses, rifas o colectas no veo más "pecado" en el hecho mostrado en el vídeo subido por un tal Jesús Paredes (que por cierto así estrena su canal y es su primer y único vídeo, sin que se aclare mayor información acerca del propietario del canal). Nada de particular tiene mirar a un grupo contar las "ganancias" de lo obtenido como fruto de su "esfuerzo" y su "sudor" tras horas de estar parados, bloqueando, con los brazos en alto sosteniendo cartulinas y gritando consignas. En todo caso habrá que dar el beneficio de la duda a los líderes tras esas manifestaciones y sus intenciones de evidente voracidad montaraz.
Hay muchas formas de aprovecharse de las necesidades de la gente y no solo el gobierno tiene experiencia en esto. Haríamos bien, desde la perspectiva de la opinión pública, en observar cuidadosamente estas andanadas de información suelta en las redes sociales, pues entre troles, bots, gandayas y alebrestados ya a veces no sabe uno dónde está parado y queda claro que la opinión es de “bote pronto”.

Panadero, a tus zapatos

En Facebook, una amistad de ánimo recalcitrante y crítica puntillosa, apunta:
Estos señores publicistas y mercadólogos a veces se pasan de veras. No contentos con echar a perder la capacidad de raciocinio de mucha gente, encima se atreven a corromper el idioma español de maneras a veces repugnantes.

Me explico:

Si digo: "Yo paseo a mi perro", "paseo" es un verbo transitivo.
¿Y cómo sabemos eso?
Porque tiene la frase "a mi perro" que funciona como un complemento directo. Sí, sé que es un razonamiento circular, pero la gramática funciona de esa manera muchas veces.
Los verbos transitivos hacen que "transite la acción" del sujeto (Yo), en este caso, al perro. El complemento directo (perro) y el verbo transitivo (paseo) dependen uno del otro para su funcionamiento en la oración. No se da el uno sin el otro.
En cambio, si digo: "Yo paseo" o "yo paseo por el parque" NO hay complemento directo; "por el parque" es un complemento circunstancial, no es complemento directo, indica el lugar (o podría indicar el tiempo, como en "yo paseo hoy") o sea, la circunstancia. Aquí hablamos entonces de un verbo intransitivo ("paseo"), pues carece de complemento directo aunque sí pueda tener un complemento circunstancial.
Como podemos ver, "paseo" es un verbo transitivo (cuando tiene el complemento directo) o intransitivo (cuando no lo tiene); ahora sí que todo depende...
Es frecuente hoy en día encontrarse con que los anunciantes dicen: "crece tu cuenta" o "crece tu dinero" o "crece tu refresco", en lugar de lo correcto que es decir: "haz crecer" ("tu dinero", "tu refresco", "tu cuenta"). En estos casos están forzando un verbo intransitivo para que se convierta en un verbo transitivo, por una mala traducción del inglés: la palabra grow puede significar "cultivar" o "crecer". "Crecer" es un verbo intransitivo, "cultivar" es un verbo transitivo. Así que es muy probable que los originales dijeran: grow your account, money, soda, esto es: "haz crecer o cultiva tu cuenta, tu dinero, tu refresco" (brincándonos el hecho de que es absurdo decir "cultiva tu refresco"); y podemos ver que "cultivar" es verbo transitivo y "cuenta", "dinero", "refresco" son en este caso complementos directos.
Pero los anunciantes se sienten respaldados por una arrogancia y soberbia incontrolables.
Ha sido mi pelea de toooooda la vida... Pero no todos caen en cuenta. ¡Albricias! Que alquien más ya hizo conciencia del mal. Esta vez seré abogado del Diablo, dado que, como el Coloso de Rodas, tengo los pies en ambas orillas.

Cuando la "Opinioncracia" nos alcanzó

Era de la Opinión... que la Democracia es un sistema político caracterizado por el poder que el pueblo deriva por voluntad propia (como si la gente pudiera tener una conciencia uniforme) hacia un grupo de representantes, y en los que se deposita la confianza de que cualquier decisión de estado, organización o gremio tenderá al beneficio común, se entiende, de la mayoría de la población que lo conforma.
Con el advenimiento y el progreso de las nuevas tecnologías de comunicación, entre las que se cuentan espacios como este blog, la Democracia definida como expuse líneas arriba ha quedado diluida. Los nuevos medios han incidido en la forma como se manifiesta y como se expresa la "voluntad popular". Ahora no solamente importan los votos, el sufragio en tanto medida de la tendencia a favor o en contra de tal o cual persona, grupo o ideología. Ahora, la marcada e inmediata posibilidad constante de acceder a medios por los cuales cualquiera puede expresar su leal saber y entender de las cosas que le interesan, ha dado pie a una nueva forma (no precisamente más noble) de ejercer el poder individual. Me refiero a la "opinioncracia".
Hoy, todos hablamos por que tenemos boca; escribimos por que tenemos un teclado al alcance. Decimos cuantas ocurrencias nos vienen a la cabeza o a los labios o a los dedos, ficciones o no. Este mismo artículo puede ser tachado de pecar de lo mismo que señala. Al fin y al cabo es la opinión del autor. Habrá quien coincida o quizá hasta comulgue con estas ideas, pero ¡ay, de aquel lector, que tome a pie juntillas las palabras de estas líneas sin antes detenerse a reflexionar sobre el asunto!; y aún peor e indeseable, sin antes investigar la veracidad de lo asentado.
¡Por que yo lo digo!
La opinión es sólo eso, pero deja de serlo cuando es una opinión fundada. Entonces, cuando el conocimiento de causa, la investigación acerca de un tema, la cuidada argumentación, cuando eso y más ocurre estamos ante el enunciado de juicios críticos y no del simple parecer de alguien que "pasaba por aquí", o de las ocurrencias y lucubraciones de una mente febril y creativa.
La opinión conlleva mucho de creencia, raya en el acto de fe. Y por muy respetable que pueda parecer no deja de ser más que un punto de vista. Y uno a veces más peligroso por su carácter dúctil y voluble que la crítica misma.
Cuando se emplea la opinión como arma disuasoria puede ser fatal ya para el asunto del cual hace objetivo, ya para quien emite de manera obcecada o simplemente divertida su decir.
Un ejemplo de los efectos que puede provocar la opinión cuando es revestida con una estructura narrativa propia de la ficción, y se la cuida con elementos extraídos de la realidad actual lo tenemos en la cita siguiente, tomada de un "correo viral" que recibimos recientemente.


Órale, ¿ficción o verdad? En este país todo es posible o... ¿Cómo la ves?

Por el Profesor. y Lic. MIGUEL TREVIÑO RÁBAGO
LOS HOMBRES llegaron por la noche al Rancho del ex-presidente. Iban en elegantes camionetas y resguardados por hombres armados. Habían sido invitados para discutir un asunto cuya urgencia ameritaba su presencia en la casa del hombre que pretendía imponer su candidato en las próximas elecciones presidenciales. La guerra estaba declarada y era feroz. El ex-presidente estaba decidido a imponerse por encima del gobernante en turno que ya no le contestaba ni el teléfono, cuando lo buscaba para solicitarle un favor.
SILENCIOSAMENTE los hombres del ex-presidente fueron entrando en la sala principal donde eran recibidos con un fuerte apretón de manos y un abrazo por parte del hombre de gran estatura. A su lado, como siempre, estaba su infatigable esposa que a pesar de ser tan chaparrita, desbordaba gigantescas ambiciones por el Poder. Eran la pareja dispareja pero políticamente muy activos había decidido adelantarse en la sucesión presidencial organizando prácticamente un "complot". No podían aceptar el quedarse "fuera de la jugada".
AL ENTRAR el hombre que vestía siempre de ranchero, los llamaba por su nombre en forma entusiasta: ¿Cómo estás Manuel? ¡Bienvenido Santiago! ¿Qué pasó contigo Fernando? ¡Mi amigazo Diego que bueno tenerte en casa! ¡Señor Obispo es un honor tenerlo aquí! ¿Cómo está el Cardenal? y así fueron llegando los trece invitados que habían sido seleccionados cuidadadosmente, luego de considerar su influencia política y sobre todo su lealtad al ex-presidente. Todo era jolgorio, risas y bromas acerca de su apariencia o sus últimas actuaciones políticas. Las burlas entre ellos no podían faltar, pero siempre guardando las distancias.
EL ANFITRIÓN los invitó a pasar a su estudio donde podrían instalarse cómodamente para dialogar. Conforme fueron pasando les fue ofrecida una copa de su bebida predilecta que sostenían en charolas, dos asistentes a la entrada del espacioso salón que servía al ex-presidente para de vez en cuando leer un periódico con sus botas sobre el escritorio. Así eran sus costumbres rancheras. Había allí cientos de libros que jamás serían abiertos por nadie de la casa. Invitando a todos a tomar asiento donde fuera su gusto, el grupo se instaló no sin antes brindar por el éxito de los planes que estaban por discutirse esa noche.
EL EX-PRESIDENTE agradeció la presencia de "sus amigos más leales" y sin rodeos les planteó el asunto que les congregaba: Mis amigos -dijo- tenemos que ponernos de acuerdo para impulsar al compañero de nuestro grupo, que merece ser el próximo Presidente de la República. Ya he intentado hacerle la propuesta al "Chaparro" pero el cabroncito -ya saben- ha llegado al extremo de no hacerle caso a nadie. Me comentan que todos los días agarra su botella y termina ahogado gritando e insultando a todos los que según él, lo han traicionado. Lo peor, es que él se cree con derecho de imponer al próximo Presidente sin reconocer que ya desgració al Partido y al país. Vean el desmadre que hay a nivel nacional. Así que, ó le ponemos un "gallo" nuestro o nos lleva la china liaría....Con éste hasta fraude hicimos y miren con lo que nos salió.....
A PARTIR de ese momento, todos los asistentes parecieron animarse y empezaron uno por uno a expresar sus opiniones. Manuel se quejó de que estaba a punto de ser expulsado del partido por expresar opiniones contrarias y hasta expediente le habían abierto; Santiago manifestó que él seguía aspirando a la presidencia, pero que entre el "chaparro" y las televisoras no perdían oportunidad de golpearlo, al grado de destrozarle hasta su vida familiar; Fernando señaló que él ya había renunciado al Partido porque era una vergüenza que el titular del Gobierno un día se comprometía en algo, y al siguiente se rajaba, por su falta de palabra y de hombría; El Obispo presente, un multimillonario cínico, casi a gritos dijo que la Jerarquía estaba indignada por tanto libertinaje propiciado desde el gobierno que no se decidía a modificar a fondo las leyes que están "corrompiendo" a la sociedad mexicana....
DIEGO EL JEFE, con ese aire aristocrático que lo caracterizaba, le dio una chupada a su habano de la mejor calidad, se puso de pié y recorriendo con la mirada a todos, dijo en tono grave: Señores, respetable Señora, creo que nuestro señor Presidente ha cometido el más grave de los pecados. Y ese es la Soberbia. Se ha olvidado todo lo que hicimos, legal e ilegalmente, para sentarlo en esa Silla Presidencial. Está hinchado de soberbia y prepotencia y es hora de darle una lección. Lo que está haciendo es entregar la próxima presidencia a los del partido tricolor y eso no se lo podemos permitir. O una de dos: O entiende por las buenas y nos toma en cuenta, o por la malas le declaramos la guerra y nos apoderamos del Partido. Ya de allí saldrá el candidato que nosotros sabemos es el mejor. No hay vuelta de hoja, aquí a ser cabrones, nadie nos gana, dicho todo esto, con todo respeto, para la dama presente.
EL EX-PRESIDENTE sonrió satisfecho. Su esposa más discreta aprobó con un movimiento de cabeza lo dicho por Don Diego que era un hombre con reputación de duro y bueno para el golpeteo político. Los asistentes apuraron el trago a sus copas, y alguno hasta hizo el intento de aplaudir, pero se contuvo. No era el momento. Sin embargo, Diego el Jefe, no había terminado. Tomó airé y pidió atención: Señores, estamos a tiempo; aquí ni el señor que está en el Palacio Nacional ni nadie es dueño del país. En este barco vamos todos y todos tenemos el derecho de ser escuchados. Es una verdadera majadería que ni siquiera a nuestro ex-presidente le tome una llamada éste mentecato que nos ha llevado a una "guerra" sin estrategia y por la cuál nos hemos desprestigiado nacional e internacionalmente. Es la hora de ponerle un hasta aquí a éste señor Presidente. Y terminó diciendo: Si le quieren llamar complot, que lo llamen, pero esto no puede continuar así. Así como paramos en seco a López Obrador, así vamos a parar en seco a los tricolores que se mueren por meter al señor ese del copetito ridículo en la residencia oficial.
NO LEJOS de allí, en una cabañita estratégicamente construida, tres técnicos en comunicaciones escuchaban la conversación de los congregados. Su asombro era total y rápidamente comunicaron a sus superiores, la naturaleza de la reunión y la calidad del material que habían recopilado. El asunto era de de máxima seguridad y debería ser entregado al Presidente en turno para su conocimiento y toma de decisiones. Cuando la reunión en el rancho cercano finalizó, los "espías" tenían dos horas de conversaciones y propuestas. Lo peor, tenían los nombres de los presentes y ausentes que compartían sus proyectos en el corto plazo. El material era explosivo y muy delicado.
SIN EMBARGO a la mañana siguiente, el mandatario "crudo" y medio aturdido escuchó la insólita grabación. Después de todo para eso se había montado un sistema nacional de espionaje político con el pretexto de combatir a la delincuencia organizada. Sin embargo, al escuchar las conversaciones en el rancho del ex-presidente, no pareció inmutarse y dió una orden sorprendente a uno de los oficiales que lo acompañaban en su desayuno: "Entréguele una copia de este material al Gobernador del copetito ridículo que allí mencionan. El ya sabrá que hacer y que medidas tomar". El oficial se quedó helado al escuchar eso y sólo acertó a decir: Sí señor.
UNA SEMANA después la camioneta del señor Diego apareció abandonada en un camino de terracería que lleva a su mansión-rancho. La prensa informó que había rastros de sangre, pero no aparecía el cuerpo de Don Diego, el mismo que se había expresado fuerte contra el regreso de los tricolores al Palacio de la República y particularmente a la imposición del hombre del copetito ridículo. Es fecha que nadie sabe dónde está el señor Diego. Pero lo más extraño es que todos los asistentes a la reunión, recibieron un pequeño sobre con una tarjeta dentro que decía: "Para que aprendan a respetar".
CUALQUIER comentario, relacionado con ésta columna, le agradecemos hacerlo llegar a nuestros correos electrónicos: trabago49@hotmail.com elobservadorpolitico@hotmail.com Cd. Reynosa, Tamaulipas; Mayo 19 de 2010.
Nota: Se autoriza la reproducción impresa y electrónica, así como el reenvío de éste material, siempre y cuando se publique el nombre completo del autor y sus correos electrónicos. Ésta colaboración es espontánea y gratuita. Correo de Voz: 01 (899) 9232106.

Es de verdad, parece verdad, ¿es verdad?
Luego de confirmar la autoría del texto citado y escribir al autor un comentario en su red personal, nos dimos a la tarea de reflexionar seriamente sobre aquel adagio silogístico que reza: "si tiene plumas, camina como pato, hace como pato, entonces es pato".
La fuerza de la ficción, de suyo y desde muy antiguo, estriba precisamente en la propiedad de verosimilitud. Es esta propiedad la que permite que niños o adultos creamos un cuento, una leyenda, un mito. El grado de cercanía de los hechos "reportados" es otro factor que incide en la calidad de "confiable" que damos a un texto.
El anterior ejemplo toma como punto de partida un hecho, la desaparición real de un importante personaje  de la política mexicana, Diego Fernández de Ceballos, ex candidato presidencial, ex diputado, ex senador de la república entre muchos notables nombramientos. Hecho que a la fecha no ha sido aclarado y en medios y pláticas de café sigue siendo motivo de discusiones, suspicacias, temores y especulaciones. 
Aderezado con situaciones factibles, la inclusión de personajes vivos, aun cuando no se mencionen apellidos, descritos de manera que facilita un reconocimiento aparentemente certero, el texto citado lleva al lector mexicano (y no exclusivamente) a adentrar sus preocupaciones y construir un mundo de posibilidades, inducir probables causas y consecuencias del supuesto acontecimiento relatado. Abona al imaginario colectivo y, quizá por eso, no deja de ser preocupante que "correos virales" como el expuesto arriba sean susceptibles de ser diseminados, contagiados a tal punto que generan distorsión de la opinión pública con efectos incontrolados.
Me recuerda un experimento hecho en Venezuela por un colega comunicólogo y que muestra cómo el discurso narrativo, cuando está estructurado de manera verosímil, es fácil de ser aceptado, asimilado y difundido como cierto, aun cuando se trate de una ficción (Barrera, L. (2010). Ficción en un blog de Internet: el autor propone, el lector infiere y dispone. Enl@ce Revista Venezolana de Información, Tecnología y Conocimiento, 7 (1), 11-26 Ficcion_en_blog.pdf). Es decir, el chisme, el rumor sean maledicentes o benedicentes, caben y tanto en la Internet que las capacidades electrónicas y personales para filtrar la información útil de la inútil o hasta nociva son puestas a prueba cotidianamente. Spam, scam, phishing, aunadas a la práctica de la distracción argumental han hecho su propio polvorín desde el cual minar algo tan delicado como la conciencia individual.

Ficciones que matan
Haciendo un somero análisis estructural del relato, las implicaciones políticas que pueden derivarse de él son delicadas, porque pueden desestabilizar la opinión pública en torno a personajes, grupos (incluido el autor) y no necesariamente en tendencias favorables. Y esa desestabilización, sin control, puede (y en otros casos ha sido así) alcanzar niveles de riesgo para personas, familias, empresas, gobiernos y naciones. Historias hay muchas. El problema no es que las haya, sino cómo son leídas.
Como ejercicio de ficción es interesante, pero como alguna vez dijo algún jefe de redacción: "cuida que lo que vas a escribir y sobre todo publicar sea oportuno, pertinente y conveniente; no solamente actual". El texto, que entiendo por la explicación del autor, Prof. Jesús Miguel Treviño Rábago, candidato por el PRD a la presidencia municipal de Reynosa, Tamaulipas, es, ni duda cabe, oportuno (en tiempo), pero políticamente impertinente tanto para el PAN, como para PRI, para puntuales personajes particulares de la historia; e inconveniente, considerando la filiación propia del autor. Es un texto que se desenvuelve peligrosamente en la cuerda de equilibrio con riesgo de inclinar la balanza hacia la difamación o hacia la apología, al amparo del disfraz de un entretenido y ¿divertido? cuento.
Claro, esta es sólo una lectura sobre el estado que guarda este nuevo sistema "político" que he dado en llamar "OPINIONCRACIA".
Ahora es tu turno, amable lector, de emitir tu opinión.